Archivo por meses: enero 2012

A falta de hipotecas, bueno es el alquiler

Ya sólo nos queda el alquiler

Ya sólo nos queda el alquiler

La sociedad española se ha tenido que adaptar a las nuevas circunstancias sociales en las que se encuentra, y comprender que la tradicional voluntad de compra ha tenido que pasar a mejor vida ante la falta casi absoluta de concesión de créditos por parte de las entidades financieras españolas, que siguen empeñadas en guardar toda la liquidez posible para afrontar los tests de solvencia que se les vienen encima.

Por ello, el número de viviendas en alquiler sigue creciendo año a año, con familias que tienen que apostar por esta opción al encontrarse con que no pueden obtener la financiación que necesitan para su vivienda, y apostando por el alquiler antes de caer en la red familiar, tan importante en nuestra sociedad.

Esta creciente demanda de viviendas en alquiler provocaría, en una situación normal, un incremento, a su vez, del precio de las rentas mensuales, el cuál no se está produciendo, sí en términos nominativos, pero no en términos reales, que es lo realmente importante.

Este crecimiento de la renta por debajo del valor de la inflación se debe, sin duda a que cada vez más propietarios optan por colocar sus viviendas en el mercado de alquiler ante la imposibilidad de lograr deshacerse de ellas a través de la venta de las mismas.

Por tanto, en el mercado inmobiliario, o más concretamente, en el mercado inmobiliario de alquiler, se está produciendo una doble fuerza que está logrando mantener los precios de manera estable durante estos meses de crisis. Por un lado, la demanda crece y tira del precio hacia arriba, pero, por otro lado, la oferta también crece, tirando del precio hacia abajo, y compensando cualquier subida teórica.

Un escenario con el que hemos cerrado el año 2011 y con el que seguiremos durante todo 2012, a poco que la situación se mantenga como hasta ahora, como parece. Y es que el horizonte temporal de los tests de solvencia exigidos por el Banco Central Europeo, que tendrán lugar a mediados de este año, es demasiado restrictivo e importante como para que las entidades financieras se quieran jugar su presencia en el mercado por la concesión excesiva de hipotecas.

El Euribor baja y las hipotecas suben

Hipotecado descendiendo a los infiernos. La autora es Élodie Durand y le puso otro título...

Hipotecado descendiendo a los infiernos. La autora es Élodie Durand y le puso otro título...

La  noticia de las últimas semanas es que las hipotecas siguen subiendo en coste para quien quiere contratar una, mientras que el Euribor continúa su descenso, como podéis comprobar en el gráfico que aparece en el margen izquierdo de esta web

Aunque parezca una parad0ja, es una reacción bastante lógica para la situación actual. Lo que no es lógico, seguramente, es la situación actual, pero si los bancos disponen de dinero suficiente el Euribor tiene que bajar. Lo que los bancos no tienen tan clara es la evaluación del riesgo que soportan por conceder una hipoteca, y como el diferencial que se aplica por encima del Euribor es el que mide ese riesgo, resulta que la paranoia de los bancos, o su síndrome del gato escaldado, es lo que está presionando al alza las hipotecas.

De todos modos, y aunque esta combinación de datos ha sido muy criticada en distintos medios, a mí me parece que es una buena noticia. Y me explico: que las hipotecas se iban a encarecer ya lo sabíamos todos, y además es un problema menor, puesto que lo realmente complicado no es el precio de las hipotecas sino su acceso a ellas. O sea, no es que se pongan caras, sino que no nos las dan.

Sin embargo, la bajada del Euribor siempre es una buena noticia para la inmensa mayoría de españoles que ya tenemos una hipoteca firmada y que estamos esperando a la revisión anual o semestral. Con la bajada del tipo de referencia, seremos muchos los que veremos bajar unos euros nuestro recibo hipotecario mensual y eso es siempre una alegría.

O sea, que si hacemos balance, la situación para la mayoría es que suben las hipotecas que nunca les darán  y bajan las que ya tienen.

No me parece algo de lo que lamentarse, la verdad.

Seguimos sin tocar fondo

Por más cálculos que se hagan, la vivienda sigue a la baja

Por más cálculos que se hagan, la vivienda sigue a la baja

Hay una ley física irrefutable que nos dice que para poder rebotar, para poder recuperar el impulso es condición necesaria, aunque no suficiente, el llegar a tocar fondo, el llegar a una superficie inferior que nos permita tomar impulso para iniciar una cierta recuperación.

Y como todas las leyes físicas ésta no iba a ser una excepción, por lo que se aplica sin condiciones y sin solución de continuidad a todos y cada uno de los ámbitos de nuestra vida, incluyendo, por supuesto, el sector de la vivienda, totalmente hundido en estos momentos de dificultad.

Porque, a pesar de lo que se nos había anunciado repetidamente, 2011 no ha sido el año de la recuperación del sector inmobiliario, más bien al contrario. Con cada vez más gente en situación de desempleo y con la crisis financiera azotando duramente al bolsillo de los ciudadanos, nos encontramos con que cada dato que recibimos es aún peor que el anterior.

El último ha sido el precio de la vivienda nueva durante 2011, que según la Sociedad de Tasación ha caído un 4% en tasa interanual, es decir ha caído sobre un precio que ya estaba en caída, así que ha sido una caída doble, lo que demuestra que no estamos mal, estamos peor.

Es evidente que el tremendo stock de viviendas acumuladas en nuestro país durante los años de burbuja inmobiliaria está impidiendo que se inicie la recuperación, ya que en un momento en el que la demanda no empuja lo suficiente, el exceso de oferta es el causante principal de la caída de precios.

Todos los agentes del sector inmobiliario esperan, sin embargo, que la llegada al gobierno del Partido Popular pueda suponer una inyección a este sector en declive, con subvenciones e inyecciones fiscales que puedan permitir un incentivo real para la recuperación.

No obstante, el optimismo es ciertamente relativo, ya que a pesar de estas ayudas la recuperación será larga y no se producirá en el corto plazo, por lo que habrá que esperar a finales de 2012, sino 2013, para empezar a ver si se ha conseguido definitivamente una recuperación convincente y duradera.

Hasta entonces, no nos queda otra que seguir recibiendo malas noticias un día sí y otro también.

El Euríbor da un respiro a las familias hipotecadas

Una alegría para empezar el año

Una alegría para empezar el año

El Euríbor ha querido hacer un regalo a las familias hipotecadas y ha cerrado el mes de diciembre en el 2,004%, lo que supone un importante retroceso con respecto al cierre de noviembre, cuando lo hizo en el 2,044%, y lo que es más importante, un aumento relativamente asumible con respecto al cierre de diciembre de 2010, el que sirve para calcular el incremento de cuota de las familias hipotecadas.

Así, si tenemos en cuenta que diciembre de 2010 cerró en el 1,526%, en tasa media mensual, nos encontramos con una diferencia positiva de 0,478 puntos porcentuales, lo que arrojará un incremento de unos 35-40 euros mensuales para una hipoteca media.

Sin duda, se trata de un incremento importante, pero muy inferior a la que habíamos venido observando durante los meses anteriores, lo cuál debería de llenarnos de alegría, y más si tenemos en cuenta que este incremento puede tornar en decremento en los próximos meses.

Y es que si el tipo de interés se mantiene, como parece que va a ser, en el 1%, el Euríbor no puede hacer otra cosa más que cotizar a la baja, lo cuál debería hará que el cierre de diciembre en el 2,004% se vaya viendo rebajado en los próximos meses.

Así, si tenemos en cuenta que en febrero de 2011 el Euríbor cerró en el 1,714%, no sería descabellado pensar en una cuota hipotecaria inalterada para las hipotecas que utilicen el cierre de febrero para realizar la comparativa de sus hipotecas, con posibilidad de, incluso, descenso de cuota en lo que se refiere a las hipotecas que utilicen el Euríbor de marzo, ya que el año pasado cerró en el 1,924%.

Por tanto, si la situación económica sigue como hasta ahora, con el riesgo de recesión congelando la voluntad de lucha contra la inflación del BCE, y por tanto, garantizando el mantenimiento de tipos en el 1% para la zona Euro, en los próximos meses deberíamos de observar cotizaciones a la baja del Euríbor.

Un respiro que todos los que tenemos hipotecas podremos disfrutar, mientras que los que soliciten nuevos préstamos hipotecarios no podrán más que envidiar, ya que los excesivos diferenciales aplicados por las entidades financieras en estos momentos impiden beneficiarse de un buen valor del Euríbor.