¿Qué son los plazos de una hipoteca?

Plazos de una hipoteca: 15 o 30 años ¿cuál es tu mejor opción?

Los plazos de una hipoteca se refieren al período de tiempo durante el cual estarás pagando el préstamo. Actualmente, los plazos hipotecarios más comunes son 15 años y 30 años, pero algunos prestamistas también pueden ofrecer otros términos.

Plazos de una hipoteca: ¿15 o 30 años?

Una hipoteca a 15 años es un préstamo que se paga en un período de 15 años, mientras que una hipoteca a 30 años es un préstamo que se paga en un período de 30 años.

Sin embargo, debes tener en cuenta que el plazo de la hipoteca puede tener un impacto significativo en la tasa de interés, el pago mensual y el costo total del préstamo.

Ventajas y desventajas de una hipoteca a 15 años:

Pros:

  • Tasa de interés más baja: Suelen tener tasas de interés más bajas que las hipotecas a 30 años. Esto se debe a que el banco asume menos riesgos al prestar el dinero por un período de tiempo más corto.
  • Creación más rápida de capital: Debido a que el préstamo se paga en un período de tiempo más corto, acumularás capital en la vivienda más rápidamente.
  • Costo total más bajo: Esto se debe a que pagas intereses por un período de tiempo más corto.

Contras:

  • Pago mensual más alto: Se debe a que el préstamo se paga en un período de tiempo más corto, lo que hace más difícil pagar las cuotas de la hipoteca.
  • Flexibilidad limitada: Te comprometes a un pago mensual más alto durante un período de tiempo más largo. Esto puede limitar tu capacidad de ahorrar para otros objetivos.

Ventajas y desventajas de una hipoteca a 30 años:

Pros:

  • Pago mensual más bajo: Esto puede hacer que sea más asequible para algunos prestatarios comprar una casa.
  • Más flexibilidad: Con una hipoteca a 30 años, tienes más flexibilidad en cuanto a tu pago mensual. Puedes elegir pagar más que el pago mínimo cada mes.

Contras:

  • Tasa de interés más alta: Esto sucede porque el prestamista asume más riesgos al prestar el dinero por un período de tiempo más largo.
  • Creación de capital más lenta: Debido a que el préstamo se paga durante más tiempo, acumularás capital en la vivienda más lentamente. Esto puede ser una desventaja si deseas acumular riqueza a través de la propiedad de vivienda.
  • Costo total más alto: Durante la vigencia del préstamo, una hipoteca a 30 años tendrá un costo total más alto que una hipoteca a 15 años. Esto se debe a que estás pagando intereses por un período de tiempo más prolongado.

Conclusión

La elección entre una hipoteca a 15 años y una hipoteca a 30 años dependerá de tu situación financiera y tus objetivos. Una hipoteca a 15 años puede ser una buena opción si deseas acumular capital rápidamente y ahorrar en intereses.

Por su parte, una hipoteca a 30 años puede ser una buena opción si necesitas un pago mensual más asequible y más flexibilidad en términos de tu cuota de pago.

Más allá de los plazos de una hipoteca, no olvides revisar a detalle los términos y condiciones del préstamo hipotecario.