Archivo de la etiqueta: vivienda

Propuestas novedosas sobre hipoteca y vivienda

Que dice que puede

Que dice que puede

Las recientes elecciones europeas han supuesto un pequeño terremoto en el escenario político español. Digo terremoto porque los grandes partidos han perdido del orden de cinco millones de votos y el sufragio se ha fragmentado hasta el punto de que España enviará al parlamento europeo representantes de hasta diez formaciones políticas. Y digo pequeño porque, contra viento y marea, contra todo lo esperado, ha vuelto a ganar el Partido Popular, y ha ganado unas elecciones en las que todo el mundo vota un poco al voleo, por aquello de que el parlamento europeo hace como que decide cosas, pero los que verdaderamente cortan el bacalao son los gobiernos nacionales.

Y dentro de este terremoto, lo más comentado está siendo la irrupción de Podemos, una formación radical de izquierdas que en sólo cuatro meses ha conseguido reunir en torno a su programa, o la figura de su líder, más de un millón de votos.

En el programa de esta formación, la vivienda y la hipoteca desempeñan un papel preponderante, así que vamos a ver qué es lo que propone este nuevo partido sobre el tema que ocupa a este blog, aunque sólo sea para ver de dónde vienen lso vientos y qué es lo que ha apoyado un millón y pico de personas.

-1-Recuperación del impuesto de patrimonio, con un mínimo exento para la vivienda familiar en función de la renta y sin exenciones para segundas viviendas.

Yo siempre he creído que el impuesto sobre el Patrimonio es doble tributación, pero vale. Parece razonable tal y como se plantea.

-2-Establecimiento de garantías reforzadas a nivel europeo para garantizar la protección efectiva del derecho a la salud, la educación, la vivienda, la jubilación, etc…

Sobre esto, ya escribí un artículo hace tiempo, así que permitidme que cite a los clásicos y tal.

-3-Adopción de un plan europeo de vivienda basado en la creación de un parque de viviendas públicas y de alquiler social, con incorporación de las viviendas vacías al parque público, gravando con impuestos los inmuebles vacíos no ofrecidos en alquiler social.

Opino que habría que hacer otro tant0 con los novios y novias infrautilizados, porque hay mucha gente necesitada de abrazos, por decirlo finamente. Pero vale.

-4- Acceso preferente al alquiler social para todos los ciudadanos sin techo y en situación de exclusión social, los jóvenes que abandonan el hogar paterno, madres solteras, mujeres maltratadas y otros colectivos con especial necesidad.

Cuando las desgracias otorgan derechos, todo el mundo se busca una desgracia. Y si no la encuentra, la crea. Pero en principio, lo reconozco, suena bien.

-5- fomento del alquiler frente a la adquisición en propiedad, otorgando subsidios familiares de vivienda en función de la renta.

Salvo por lo de los subsidios, que todos sabemos en qué acaban, lo aplaudo sin reservas.

-6- Consideración del suministro de luz, agua y calefacción como un derecho básico inalienable, que debe ser garantizado por parte de empresas públicas.

Creo que aquí empieza el festival de piruletas.

-7- Actualización de los padrones y registros de la propiedad vinculados a los servicios de agua, gas y electricidad para conocer el uso de las viviendas y para crear un registro de viviendas desocupadas.

Insisto en lo del padrón, también, para novios y novias con poco uso, extendiéndolo progresivamente a cónyuges.

-8-plan de rehabilitación energética de edificios y de viviendas con objetivos anuales que permita un ahorro estimado para el sector del 50% de su consumo energético respecto al nivel de 2009, sin que todo ello suponga incremento de los precios de alquiler.

¿Un 50% de ahorro energético y sin incrementos de precios? Dios los oiga, y tal…

-9-Limitación de las actuaciones administrativas o judiciales a la devolución del uso al legítimo propietario en caso de que dicho inmueble resulte necesario para el uso o sostenimiento de su unidad familiar.

Esta medida viene a decir que si alguien tiene que quedarse en la calle es el hijo del propietario. Todos los demás tienen algún derecho sobre esa vivienda.

-10- Reorientación de instituciones como el frob y la sareb para convertirlos en instrumentos dedicados a la recuperación de las ayudas públicas concedidas a la banca.

Mi aplauso sin reservas.

-11- Moratoria de la deuda hipotecaria sobre primeras viviendas de las familias con dificultades para afrontar el pago de los préstamos, y cancelación inmediata de la misma en los casos en que haya prácticas fraudulentas o con probada mala fe por parte de las entidades financieras.

Si se define bien lo que es eso de una dificultad para pagar, no lo veo mal, aunque los que más lo van a celebrar son los que trabajan en negro, porque además de no pagar impuestos tampoco pagan la hipoteca.

-12- la reestructuración de la deuda incluirá la corrección de su valor en función de la corrección del precio de la vivienda hipotecada (en especial en caso de pérdida de su valor), y las letras no superarán el 30% de los ingresos familiares, garantizando un nivel de vida digno.

Est0 es una versión progre de la ley del embudo, porque cuando la vivienda subía y la vendíamos, estábamos todos contentos. Pero si baja, que se joda el banco. A veces somos la leche…

-13- Establecimiento de mecanismos de condonación de la deuda para paliar la situación de emergencia habitacional.

Eufemismo por no pagar, y tal. La razón ya se irá encontrando.

-14-Paralización inmediata de todos los desahucios de primeras viviendas y de locales de pequeños empresarios

-15- Despenalización de la ocupación por parte de familias o personas en situación de vulnerabilidad o sin techo de viviendas vacías pertenecientes a bancos y cajas intervenidos o rescatados, o de viviendas vacías durante más de un año de inmobiliarias y promotoras.

Esta es como la ley de la patada en la puerta de Corcuera, pero del otro lado. Creo yo.

En resumen, como veis, el tema de la vivienda y la hipoteca sigue ocupando el centro del debate político en España. En este caso, da la impresión de que hay gente por ahí que espera que venga el rey de los elfos a pagar la cuenta, pero no cabe duda de que es bueno que haya quien se preocupe del asunto, más allá del fatalismo y la resignación.

Ya no solo se venden las viviendas de costa

Y no simplemente filetes

Y no simplemente filetes

Llevábamos unos años con la cantinela de que los inversores internacionales aprovechaban la caída de los precios en las viviendas de las zonas costeras para realizar inversiones a medio-largo plazo, haciendo uso de su mayor poder adquisitivo con respecto al comprador medio español, de manera que estas zonas se estaban convirtiendo en auténticos nichos para alemanes y rusos.

Sin embargo, la caída de precios se ha ido generalizando al conjunto de España y ha alcanzado a las grandes ciudades, hasta ahora tabú para estos compradores internacionales, pero que han sabido entender que ahí puede estar el verdadero negocio, a poco que el precio de la vivienda comience a recuperarse en breve, que lo hará, al menos en estas ciudades.

Así, con viviendas en Madrid que han caído cerca del 20-30% de su valor, mucho más si nos movemos a zonas de la periferia de la Capital, es evidente que hay una clara ganancia en ciernes ya que este precio terminará por recuperarse debido a la ingente demanda de vivienda que siempre existe en los grandes centros urbanos.

En definitiva, se trata de un negocio redondo para todas aquellas personas con los suficientes fondos como para hacer frente al pago de estas viviendas sin tener que incurrir en los abusos de las entidades financieras con los diferenciales. De esa manera consiguen el beneficio máximo, beneficiarse del futuro aumento de precio sin sufrir la actual situación bancaria.

Basta con echar un vistazo a las estadísticas del INE para comprobar que esta tendencia que ya venían advirtiendo los profesionales del sector se está convirtiendo en una realidad. Estos datos nos hablan de un creciente número de compradores internacionales haciendo inversiones en los grandes centros urbanos, como Madrid o Barcelona.

Hay que tener en cuenta que el precio de la vivienda de costa tiene un evidente límite de crecimiento, ya que la demanda para este tipo de inmuebles siempre está supeditada a la situación económica, mientras que los pisos en las grandes capitales tienen su propia demanda independientemente de la situación económica en la que nos encontremos, y ahí está el gran beneficio en ciernes.

¿Se prepara un nuevo impuesto a la propiedad?

Agujero presupuestario

Agujero presupuestario

Cuando la fiera está hambrienta, no pone muchos reparos a la presa a la que puede echar el diente, ni tiene mucha memoria a la hora de recordar a sus votantes,sus promesas o eso a lo que en su día llamaban principios y se han demostrado simples pretextos.

Por mucho que nos cuenten que van a bajar impuestos, por mucho que nos digan, incluso, que de momento no los van a subir, el caso es que tienen que recortar el déficit y para ello van a intentar incrementar los ingresos, porque de reducir el gasto no hablan siquiera.

¿Y de dónde van a tirar para incrementar los ingresos? Pues de donde se pueda, por supuesto. El IRPF no lo pueden exprimir mucho más, porque los ciudadanos asalariados son cada vez menos y con más dificultades para llegar a fin de mes. El Impuesto de Sociedades no se puede tocar, porque las empresas no tienen mayor problema en largarse a donde les cobren menos. El IBA es una opción, y posiblemente la tocarán, ya sea incrementando el tipo general al 23% o eliminando artículos de la cesta de bienes favorecidos por el IVA reducido o super-reducido.

¿Y qué les queda entonces?  ¿El alcohol, el tabaco y las gasolinas? Esa cuerda ya da para muy poco, con las reducciones de consumo que hemos visto.

Les queda la Propiedad, y el Ministerio de Hacienda repara algún nuevo tipo de tributo que grave la propiedad, muy especialmente de viviendas, que son las que sus dueños no se pueden llevar debajo del brazo. No se conforman ya con cobrar Transimisiones Patrimoniales (un verdadero estacazo), los derechos sobre las hipotecas y el IBI anual: ahora buscan el modo de que el propietario pague un impuesto anual sólo por el hecho de serlo, ya sea considerando la vivienda como un rendimiento computable en el IRPF, eliminando todas las deducciones existentes hasta la fecha o creando un nuevo impuesto totalmente nuevo, que castigue la tenencia de inmuebles.

Lo peor de todo es que de estas cosas noi tenemos que enterar leyendo los documentos que el Gobierno envía a Bruselas, porque aquí no dicen ni mu. Cito textualmente: “El Gobierno estudiará diversas alternativas, entre otras posibles, la imposición sobre la propiedad, la imposición medioambiental con el menor impacto posible en la competitividad, procedimientos de pago por uso de servicios, el incremento de los impuestos por uso frente a los que gravan la transmisión de la propiedad o la imposición sobre el sector financiero en el marco armonizado de la UE”.”

Cuando se ven obligados a hablar claro, se retratan…

 

 

La burbuja inmobiliaria China

vivienda en China

El otro día hablábamos de la burbuja inmobiliaria británica y de cómo no se libran del condenado fenómeno ni esos tipos tan flemáticos y sensatos que son los ingleses. Hoy, para seguir con el recorrido y demostrar que las burbujas inmobiliarias son un fenómeno universal vamos a ver el otro caso, el de China, mucho más preocupante que el anterior por las repercusiones económicas y financieras que podría tener para el resto del mundo.

Como sabéis, suelo ilustrar los artículos con alguna foto alusiva y un pie que la explique desde la ironía, pero en esta ocasión creo que es necesario usar una gráfica como apoyo, sin cachondo alguno, y un poco más grande de lo habitual. Echadle un ojo detenidamente, por favor.

El despegue de la economía China y su papel preponderante como nueva potencia económica ha atraído gran cantidad de capitales del exterior, y no sólo destinados a aumentar la producción industrial y deslocalizar la industria occidental. Muchos de esos capitales aguardan una buena oportunidad de inversión y entre tanto se colocan en el sector inmobiliario, que ha sufrido un enorme auge en el país debido a la enorme migración de personas del campo hacia las ciudades. Hablamos de casi ciento cincuenta millones de personas en veinte años, aunque algunos mencionan cifras mucho más abultadas.

El crecimiento anual de China es de alrededor del 7,7% y la balanza comercial positiva junto al mercado inmobiliario son las grandes bazas del gigante asiático. El Gobierno chino, además, lleva años jugando al cubilete con el valor de su moneda para intentar atraer capitales extranjeros, así que no es de extrañar que al final se haya producido una enorme acumulación de dinero tras sus fronteras.

El problema, por supuesto, es que ese dinero está allí a título de préstamo y que en algún momento los que lo pusieron querrán recuperarlo. La conclusión final es que China es ahora  uno de los países más endeudados del mundo con un 215% de su PIB en deuda (según datos del Banco Popular de China, correspondiente a un 75% en deuda pública y un 140% del PIB en privada).

¿Y qué está sucediendo? Que la larguísima crisis de Occidente está impulsando a algunos de esos inversores a intentar deshacer sus inversiones, lo que unido al debilitamiento de la demanda ha hecho que la bolsa china lleve tres años seguidos de caídas y la vivienda ya haya iniciado la cuesta abajo, como podéis ver en la gráfica.

Si se confirma el estallido de la burbuja china, que es justamente lo que yo preveo, la crisis de las hipotecas subprime va a ser una broma de niños comparada con la crisis de la hipoteca china.

Veremos en unos meses.

¿Alguien se cree que estemos en fase de recuperación?

De Guindos, bájate del guindo

De Guindos, bájate del guindo

Cada vez que escuchamos a un portavoz del Gobierno contándonos milongas sobre la fase de recuperación que estamos atravesando no puedo por menos que echarme a reír, sobre todo si analizamos la realidad que nos encontramos día sí y día también en nuestras calles, con un incesante aumento de las familias con problemas para llegar a final de mes, muchas de ellas sin ningún ingreso mensual, y con la pobreza imperando en nuestra sociedad.

Y así queda constatado con cada nueva estadística que aparece en los medios de comunicación con las que volvemos a caer a las catacumbas de la economía europea y mundial, y sobre todo si tienen que ver con el mercado inmobiliario, el eterno problema de nuestra economía.

Sin ir más lejos, acabamos de conocer los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) referentes a la firma de nuevas hipotecas en período anual de enero a enero y son realmente para echarse a temblar, con una caída del 32,4% que vuelve a demostrarnos que todavía no hemos tocado fondo.

Porque no podemos olvidar que hasta que no lleguemos al final de la caída no podremos empezar a plantearnos, bajo ningún concepto, alguna posibilidad de empezar a crecer nuevamente, por mucho que nos empeñemos, un fondo que se viene anunciando en repetidas ocasiones pero que nunca parece llegar.

De hecho, los datos de enero suponen un valor negativo durante los últimos 45 meses, de manera consecutiva, y acentúa aún más la caída que se había producido en diciembre, cuando las hipotecas se habían reducido en un 30%.

En valores absolutos nos encontramos con un total de 17.464, lejos de las 25.447 que se firmaron durante el mes de enero del año 2013, con un valor medio de cada hipoteca de 101.628 euros, un insignificante repunte del 0,1% con respecto al mes de diciembre.

En definitiva, cada vez que habla un Ministro sube el pan pero no la economía, a pesar de que en sus palabras siempre auguran esta posibilidad, esta opción, o aseveran que el crecimiento está a la vuelta de la esquina, y ¡amig@!, nada más lejos de la realidad, me temo.

La vivienda y la reforma fiscal

Debate sobre la reforma fiscal

Debate sobre la reforma fiscal

El grupo de expertos ha entregado por el fin sus consejos para la reforma fiuscal y , como no podía ser de otro mod, nos hemos echado todos a temblar. Es evidente que España necesita recaudar más, pero eso significa necesariamente que lo van a sacar de algún lado y ya sabemos a quiénes no se lo van a sacar.

Por lo que a nosotros se refiere, una de las cosas que más escama es el tratamiento que se le da a la vivienda en propiedad.  En el informe se menciona este asunto con dos líneas principales de actuación: la eliminación de la deducción por vivienda y la incorporación al IRPF de los rendimientos de la vivienda habitual.

Lo intentamos detallas un poco, aunque no se sepa todavía qué saldrá adelante y qué no, sobre todo con un Gobierno como este, que no ha visto aún ningún tema que no convenga dejar parea más tarde.

1.- Eliminación de la desgravación por compra de vivienda habitual.  La idea es llevar adelante esta supresión poco a poco, en cinco o diez años, ya que no tiene sentido seguir fomentando la compra de vivienda por razones fiscales después de la burbuja inmobiliaria que nos hemos comido. Y digo yo que razón no le falta, pero me gustaría que explicase cómo vamos a vender así las viviendas del banco malo. Y digo “vamos” porque son de todos, ya que entre todos las hemos pagado.

2.- Gravamen de los rendimientos de los bienes inmuebles en el IRPF. Hasta ahora se consideraba rendimiento el 2% del valor de las segundas viviendas y se pretende ahora que sea ingreso también un porcentaje de la vivienda habitual. Quizás otro día explique en más detalle esto, pero por norma general quiere decir que vas a declarar más ingresos de los que tienes realmente, porque la casa en la que vives es para eso, para vivir. Lo que viene a significar, en el fondo, es que la casa es un bien de luijo y por eso te exigen que pagues por ella aunque sea tuya. La leche…

3.- Los rendimientos del alquiler pasan a tributar al tipo impositivo del ahorro y se elimina la deducción sobre esos rendimientos existentes en la actualidad (60%). No parece buena idea, porque desincentiva al propietario a poner la vivienda en alquiler, lo que encarece los alquileres.

4.- Eliminación de la deducción por obras de mejora en la vivienda habitual.  Todos sabemos que es  un colader0 enorme, pero de ahí a suprimir las deducciones hay un abismo, porque con esto se consigue retrasar más aún la necesaria adaptación de los inmuebles antiguos a las nuevas necesidades energéticas, por ejemplo.

5.- supresión del impuesto de Transmisiones Patrimoniales: con esto desaparecería ese impuesto salvaje que se llevan las autonomías y que supone en general el 8% del valor del inmueble. Este impuesto desincentiva la compraventa de vivienda usada y es en realidad un caso de doble imposición por el mismo bien, ya que se pagó el IVA al comprarla nueva. A mí me parece buena idea.


Se habla de otras muchas cosas, como la actualización del catastro, pero en eso ya no entramos porque en vez de dinero da trabajo, y no creo que estén por la labor.

 

La crisis de Crimea, ¿nueva crisis inmobiliaria?

¿Pero tú sabías donde estaba Crimea?

¿Pero tú sabías donde estaba Crimea?

Basta con echar un vistazo a los últimos datos de compraventa de vivienda para comprender que hay un mercado emergente que estaba revitalizando, por sí solo, el sector inmobiliario español, y éste no es otro que el mercado ruso, gracias al poder adquisitivo de sus ciudadanos este mercado se ha caracterizado por realizar gran parte de las operaciones que se han venido haciendo últimamente.

Y lo que es más importante, operaciones que rara vez se producen sobre los inmuebles más baratos, si no que apuntan principalmente a los más caros, con lo que el volumen total de adquisiciones se ha disparado en los últimos meses, para mayor gloria de los propietarios que han conseguido “colocar” sus viviendas.

Sin embargo, la crisis que se está produciendo en la región ucraniana, al menos hasta ahora, de Crimea está poniendo en jaque a todo el sector inmobiliario que ve como se acerca la posibilidad de que desaparezca la gallina de los huevos de oro que les ha estado alimentando hasta ahora.

Porque todo apunta a que la Unión Europea acabará por aplicar sanciones de diverso tipo a Rusia por su invasión “diplomática” de Crimea, y estas sanciones siempre tienen un cariz económico con lo que es más que probable que los ciudadanos rusos dejen de tener la posibilidad de poder mover su dinero con la misma facilidad.

Un duro golpe para el sector inmobiliario de las regiones costeras, sobre todo, que es donde los ciudadanos rusos estaban centrando sus compras de vivienda, para aprovechar el buen tiempo. No hay que olvidar que estas regiones es donde existe una mayor bolsa de viviendas vacías como consecuencia del exceso de construcción que se produjo durante los años de burbuja inmobiliaria.

Veremos como se resuelve finalmente esta crisis, pero parece que el sector de la vivienda de nuestro país ha cogido el gafe, porque cada vez que se ven visos de ligera recuperación nos encontramos con un nuevo golpe que acaba por tirar por los suelos todas estas esperanzas, esperanzas que hace tiempo que dejaron de ser de color verde para tornarse del negro más absoluto.

El clima como factor a la hora de elegir vivienda

Mapa de la pobreza energética

El precio de la energía es un factor tan determinante a la hora de elegir residencia que el mercado se ve distorsionado por sus fluctuaciones más de lo permisible.

Hoy, además de la hipoteca y otros modos de pagar la vivienda, vamos a acercarnos también a otro tipo de problemática que se empieza a hacer cada vez más aguda con las abusivas subidas de la electricidad y el modelo de planificación energética que disfrutamos.

Hoy vamos a hablar de pobreza energética.

El concepto de pobreza energética ha pasado en poco tiempo de ser un absoluto desconocido a figurar en la primera línea de todas las discusiones sobra acción social, redistribución de renta y problemática ambiental.

Como idea, la pobreza energética se acuñó en Gran Bretaña a finales de los años ochenta y se considera pobres energéticos a los consumidores que destinan más del 10% de sus ingresos a pagar las facturas de energía o que no logran mantener sus viviendas a 20ºC en invierno o 25ºC en verano. Estas temperaturas, por supuesto, son orientativas, y sirven para tomar medidas homogéneas así que no vamos a entrar a discutir ( y se podría) si no son un verdadero exceso o se trata de unos mínimos.

La pobreza energética implica >varios impactos sociales, sanitarios y medioambientales. En una casa mal climatizada, las personas están más expuestos a problemas de salud relacionados con el frío y la humedad. Los enfermos crónicos, niños y ancianos son los más afectados.

Una de las causas principales de la pobreza energética es la mala calidad de las viviendas, pero la principal es la creciente escasez de energía y su encarecimiento progresivo, por vía de precios o por vía de reducción de salarios, que son las dos maneras que nos están llevando a ser más pobres cada día.

Según la Asociación de Ciencias Ambientales, la pobreza energética puede estar causando en España entre 2500 y 9000 muertes prematuras al año, una cifra muy superior a la que causan los accidentes de tráfico y que no deja de incrementarse año tras año debido al raro vodevil de nuestras tarifas eléctricas.

La gran pregunta que ahora se plantea el ciudadano es si vale la pena ahorrar energía o no. Seguramente sigue valiendo la pena, pero la estrategia de las eléctricas consiste en transmitirnos la idea de que podemos ahorrar electricidad, pero no dinero, y precisamente para lograr ese objetivo cargan todas las subidas sobre las cuotas mínimas en vez de hacerlos sobre las tarifas de consumo o precio por kilowatio.

¿Y por qué hablo hoy de este tema? Porque la compra de vivienda, la hipoteca y todos los cálculos que apareja se están viendo cada días más condicionados por el precio de los suministros domésticos, dejando la renta disponible en cantidades ridículas.

Y así no hay recuperación posible

Hipoteca y derechos. ¿Sabemos de lo que hablamos?

Pues no: no es una oveja...

Pues no: no es una oveja… Ni tampoco una foto trucada.

Vengo de leer ahora mismo un saco de comentarios sobre el referéndum suizo sobre la limitación de entrada en el país a los miembros de la Unión Europea y he terminado de convencerme de que al gente no tiene ni idea de lo que son una serie de conceptos básicos que marcan el sentido de nuestra sociedad y nuestras instituciones.

Y ya me pasó el otro día leyendo los comentari0s a mi último artículo sobre las expropiaciones, multas y demás castigos contra los pisos vacíos. Conste que me encanta que se comenten los artículos y debatir con los lectores, siempre que se puede, pero cada vez me convenzo más de que algunas cosas, que consideraba bromas o intentos de desviar la atención hacia lo populista, las piensa la gente en serio. Y alucino.

Así que una vez más, y van cien, me veo obligado a ir al origen de los conceptos.

¿Sabemos lo que es el derecho al trabajo? ¿Sabemos lo que es el derecho a la vivienda? ¿sabemos, incluso, lo que significa el concepto de democracia? ¿O simplemente tenemos una idea caga que leímos en el envoltorio de una piruleta?

El derecho al trabajo que consagra la constitución, significa, más ni menos, que nadie puede impedirte trabajar, ni siquiera por sentencia judicial. Te pueden encarcelar, poner multas, expulsarte el país o lo que regule la ley para cada caso, pero nunca y bajo ninguna circunstancia se te puede prohibir  ganarte la vida con el trabajo. Este artículo legal pretende combatir aquella práctica comunista mediante la cual no se podía trabajar sin estar afiliado al sindicato, y no se podía uno afiliar al sindicato si no te avalaba el partido o los respresentantes de zona (o sector), con lo que se conseguía que un elemento no afín se muriese de hambre, pues no lo afiliaban al sindicato y no podía trabajar.

Eso significa el derecho al trabajo, y no que alguien tenga que darte un empleo, pagarte un salario y afiliarte a la Seguridad Social. Eso ya no es un derecho propio: eso es imponerle, porque sí, una obligación a otro.

Con el derecho a la vivienda sucede los mismo: el artículo de la constitución que regula el derecho a una vivienda digna se refiere a que nunca se te puede obligar a vivir en un puñetero cuchitril, o en condiciones insalubres. Y se refiere a un hecho que ahora ya no vemos tan a menudo, pero que en su momento era muy habitual: las viviendas que facilitaba la empresa a sus trabajadores y en las que a. a menudo, era obligatorio o casi obligatorio residir.

Un ejemplo, por poner uno cualquiera, eran las casa cuartel de la Guardia Civil, donde los guardias debían residir obligatoriamente o los pabellones obreros de las minas o de las azucareras, que yo recuerdo tan bien.

Por lo tanto, el derecho a la vivienda que regula la constitución hace alusión a que no puedes ser obligado a vivir en la calle (derecho a que no te echen de casa como se hacia con los judíos durante el III Reich, antes de pasar a medidas peores) ni tampoco se te puede forzar a vivir en una vivienda que no cumpla las condiciones mínimas.

Pero no significa que te tengan que regalare una vivienda, ni que los demás te tengan que pagar tu casa, ni tu alquiler, ni tu hipoteca, porque la vivienda es un derecho. Tienes derecho a residir en una vivienda digan, pero te la pagas tú, la consigues tú y la barres tú. El derecho alude a lo que no te pueden obligar, no a lo que te tienen que dar.

Y si la vivienda deja de ser digan porque no has sacado la basura en un año, no tienes derecho a exigir que vengan los vecinos a sacarte la porquería. ¿Se entiende mejor así?

Porque es increíble lo que uno tiene que leer y escuchar algunas veces…

 

 

Los pisos no van a subir en 2014. Razones (IV). Batacazo demográfico

Lo que dejaron a medias...

Lo que dejaron a medias...

Cuando hablo de batacazo demográfico soy plenamente consciente de que se trata de un concepto que puede estar muy claro en unos sitios y no tan claro en otros. Siempre habrá más demanda de vivienda en el Paseo de la Castellana que en mis queridas tierras cepedanas o del Bierzo, pero lo cierto es que el c0ncepto demográfico, en conjunto, afecta y mucho a las expectativas que se puedan crear sobre el precio de la vivienda.

La primera pregunta que cabe hacerse es qué pasa con las viviendas que ocupaban los que se dedicaban a la construcción de viviendas. Parece una broma, pero es un hecho que los muchos cientos de miles de obreros, a menudo foráneos, que posibilitaron el boom de la construcción hace una década, vivían en alguna parte. A medida que el sector de la construcción se fue debilitando, no sólo quedaron vacíos los pisos recién construidos, sino también los pisos que ocupaban los albañiles que se tuvieron que marchar. El efecto vacío fue, por tanto, doble. Y no se aplica sólo a la construcción.

Esto, que podría parecer una anécdota, se convierte en un síntoma de algo mucho más grave cuando se echa un vistazo a los datos para ver que que desde 2012 se observa y cito el informa de Catalunya Caixa “un notable colapso en la creación de nuevas familias, con una media escasa de 59.800 hogares anuales entre 2012 y 2017, y con una marcada tendencia decreciente

Esto viene a significa que nuestro aumento de población ( España ha pasado de tener  41 millones de habitantes del año 2002 a más de 46,5 millones en 2013) no se ha convertido en una creación de nuevos hogares, que es lo que realmente necesita el mercado inmobiliario.

¿Razones? Muchas: Brusco descenso de la natalidad, retorno de inmigrantes a sus países de origen, emigración de españoles, o simplemente jóvenes que siguen con sus padres, han regresado con ellos, o viven en pisos compartidos sin emanciparse ni residir en una vivienda independiente.

Con esta debilidad latente de la demanda, y lo que he explicado en capítulos anteriores, es muy difícil que la demanda supere a la oferta empujando hacia arriba los precios en este año que comenzamos. Quizás todo lo contrario.

Y en algunas ciudades del interior, tremendamente dependientes de los flujos migratorios del medio rural, la subida no se producirá ni a medio ni a largo plazo. Mi pronóstico es que no subirán nunca, pero tampoco quiero pasarme.

Los pisos no van a subir en 2014. Razones (III). Desesperación por vender

Gente esperando a que baje un piso

Gente esperando a que baje un piso

Que no, que los pisos no suben. Que la jugada esa de compre hoy, y compre ahora, porque dentro de veinte minutos pagará el doble, sólo funciona con los billetes de algunas aerolíneas de bajo coste, y sólo si no borras las cookies o no vas a buscar a otro sitio, como el ordenador de una biblioteca.

Con la vivienda, es mejor no caer en ese canto de sirena, porque los precios no van a subir en 2014 y, nos cuenten lo que nos cuente, no estamos ahora ante la gran y única oportunidad de nuestra vida. Si somos caprichosos y queremos un piso determinado, pase. Si lo que queremos es un sitio para vivir, mejor esperar un poco porque de momento, no suben los inmuebles.

¿Y cómo podría ser de otro modo con los descuentos que plica el Sareb, nuestro bienamado banco maloso?

El descuento en el valor de los activos inmobiliarios que han sido transferidos a la Sareb  llega a nada menos que el 54,3% en vivienda y el 63% en obra comenzada. Esto provocará que en los próximos trimestres salgan al mercado viviendas con unos precios reducidos, y que además hay que vender cuanto antes, porque la cosa apremia.

A esto, hay que añadirle la profecía autocumplida que se genera en la calle viendo la preocupación de los que tienen necesidad de vender y no venden:  las compras de vivienda se aplazan por la expectativa deflacionista, con una componente añadida que es la muerte del mito. Parece una broma, pero el hecho de que se haya demostrado falsa la frase “los pisos no bajan nunca”, inclina también los precios a la baja por la defección, y desafección, de todos los seguidores de esta frase, casi mantra religioso.

Por tanto, añadimos una razón más para no prever subidas en 2014: expectativas bajistas combinadas con desánimo por parte de los vendedores.

¿Y las hipotecas? Bien, gracias. Durmiendo las dejé.

Los pisos no van a subir en 2014. Razones (II). Su precio actual objetivo

Más expectativas

Más expectativas

Seguimos con las razones por las que los precios no van a subir en el próximo año. Que no se diga, si me equivoco, que no me he querido mojar.

La segunda razón, es que el precio de los pisos sigue siendo caro si objetivamos su precio. ¿Y eso cómo se hace? Pues con estadística, y comparando los resultados a los precios de otros países y de otras épocas.

Desde sus máximos allá por 2007, la vivienda ha caído alrededor de un tercio en su valor. Pero el precio objetivado no se mide en dinero, por raro que parezca, sino en esfuerzo, y como los salarios también han bajado, tenemos que el esfuerzo para comprar una vivienda no ha descendido esa misma tercera parte, sino mucho menos.

En teoría, y tomando esos datos, el precio de la vivienda debería estar cerca de cinco veces la renta disponible. Una persona que gana treinta mil euros al año, suele aspirar a un piso de ciento cincuenta mil, para seguir el ejemplo. Actualmente, los precios de la vivienda, y ya con las bajadas acumuladas, se acercan a seis veces la renta disponible anual, con lo que esa variable, por sí sola, nos indica que la vivienda tiene que bajar aún entre un quince y un veinte por ciento para acercarse a lo que se considera su valor asequible, aun cuando ha disminuidos de momento el coste de financiar una hipoteca

La otra opción sería que se elevara esa renta disponible, ¿pero alguien cree que la actual dinámica de empleo y salarios va a hacer que mejoren los salarios medios en 2014? Yo no, francamente, y mucho me temo que veamos todo lo contrario en esta extraña carrera hacia el objetivo final de producir más barato pero no tener a quién vender lo producido. Por eso, el año entrante, no puede subir la vivienda.

Otra causa que podría abaratarlos sería la introducción de incentivos fiscales para su compra, pero precisamente hemos estado hablando de eso en artículos anteriores: el Gobierno lleva justo el camino contrario, pensando en eliminar la deducción por vivienda en un intento desesperado de elevar la recaudación. Por ese lado, entonces, tampoco hay muchas esperanzas.

Si los precios son objetivamente elevados y la renta disponible no crece, ya que los salarios reales descienden, es difícil que los precios suban.

Pero hay más razones y las iremos abordando.

Entre tanto, ¡feliz año nuevo a todos!