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¿A qué huele una hipoteca?

El perfume. Historia de un asesino.

El perfume. Historia de un asesino.

Como diría el inolvidable personaje de Apocalypse Now, me encanta el olor de las hipotecas por la mañana. Huelen… a Victoria.

El chiflado aquel, de todos modos, hablaba de napalm.

Las hipotecas, con llegar a ser un arma de destrucción masiva no van tan lejos, pero parece que el olor de la hipoteca, o el olor de la vivienda que se vende, es también muy importante a la hora de promocionar lo que estás vendiendo.

¿Por qué nos íbamos a fijar sólo en la vista? Cuando intentamos persuadir a alguien, o incluso cuando salimos de ligue, sabemos de sobra que no basta con tener un buen aspecto exterior (vista) y no decir tonterías (oído), sino que también es muy importante oler bien. Sin embargo, a la hora de vender una vivienda, se suele cometer el error de fiar todo su atractivo a su tamaño, luminosidad, y a la zona en la que se encuentra.

Una casa que se vende es una casa que hace pensar a  su futuro habitante que será un lugar donde esté a gusto, un lugar cómodo y sobre todo un lugar agradable para vivir. El olor a cerrado, a humedad o a cañerías no ayude, aunque todo el mundo sepa que eso es lo que ocurre cuando una casa está cerrada. Todo el mundo sabe también que ese chico o esa chica despampanante que acaba de conocer va al baño, tiene legañas y mal aliente por las mañanas, pero eso no impide que se trate de mitigar la idea. ¿Por qué no se hace con las casas?

Una hipoteca es una casa vendida, y una hipoteca tiene que oler a fresco, a limpio pero sin recordar un hospital, a posibilidades, en suma.

¿Hay que evitar los malos olores? Por supuesto, pero no sólo esos: también todos los que sean raros o infrecuentes y lleven al visitante a tratar de adivinar a qué huele, distrayendo su atención de lo que ha venido a ver. Una barrita de incienso exótico, por ejemplo, puede hacer que el posible comprador pase el tiempo intentando adivinar a qué huele y luego no sea capaz de saber siquiera cuántas habitaciones tenía el piso.

O sea que vis a, sí, pero también olfato. Que una casa no se vende así como así y no s epuede dejar de lado ningún detalle.

 

La vivienda y las cuentas públicas

Lo que el Estado recaudó con el mercado de la vivienda. Grafico de Idealista.com

Lo que el Estado recaudó con el mercado de la vivienda. Grafico de Idealista.com

Ya es oficial: el agujero en nuestras cuentas ha llegado a un billón de euros. Ese es el importe de nuestra deuda pública, del que el 86 % corresponde al Estado, un 10 % a las Comunidades autónomas y un 4% a los ayuntamientos. En realidad, es el Estado central es responsable de una parte un poco menor, ya que ha soportado el fondo de liquidez de las comunidades en quiebra y los fondos para pagos a proveedores de las administraciones locales.

El caso es que las cuentas del Estado no cuadran, y son muchas las razones. Una de ellas, que nuestras hipotecas le facilitaban unos maravillosos ingresos que, de pronto, han desaparecido. Y los gastos nunca desaparecen, porque para suprimir gastos hay que cabrear a alguien, y el mayor deseo de cualquier político en nuestro sistema es poder tener a todo el mundo contento, aunque sea a costa del futuro, un futuro en el que a lo mejor gobiernan otros, que serán los que tengan que lidiar con ese toro, o comerse ese marrón, si hablamos más claro aún. De eso va la democracia, se supone

Echad un ojo a la gráfica: esos eran los ingresos que el mercado de la vivienda, a través de distintos impuestos y cargas, facilitaban al Estado, y su evolución en estos años.

El caso es que de 2007 a 2013, los ingresos tributarios procedentes de la vivienda se han quedado en menos de una tercera parte de lo que eran. ¿Veis ahora por qué nadie estaba dispuesto a detener aquella locura de los millones de pisos construidos, las hipotecas concedidas hasta al perro del apuntador y la euforia de los políticos? ¿Comprendéis ahora pro qué Rodrigo Rato, todo un ministro de Economía, dijo que “las viviendas suben porque la gente las compra y las puede compra”?

Al final las cosas siempre tienen una explicación y rara vez tiene que ver con la buena fe, al menos en estos casos en los que aparece involucrada la codicia o la especulación.

Los presupuestos municipales, los de las Comunidades Autónomas y los del Estado siguen anclados en unos tiempos en los que disponían de ese dinero. El caso es que ya no existe esos ingresos, ni tampoco existen las Cajas de Ahorros para seguir metiendo el sablazo al ciudadano por la puerta de atrás, y las cuentas acaban por cantar solas. O por desplomarse.

Acabo con una anécdota esclarecedora: en la mayoría de los ayuntamientos, los presupuestos no se diseñan viendo los ingresos y decidiendo en qué se puede gastar ese dinero. Lo que se hace, en el mundo real, es decidir primero el gasto y luego, sólo después, ir buscando de dónde va a salir ese dinero.

Y si no lo creéis, porque es increíble, preguntad a cualquiera que haya estado alguna vez en política municipal.

Es de risa.

La vivienda como bien regulado. El caso turístico

Alojamientos túrísticos

Alojamientos túrísticos

Supongo que a estas alturas ya habréis oído todos hablar de eso que llaman economía colaborativa y que para unos es el intercambio comercial del futuro, eliminando intermediarios, mientras para otros es un simple refinamiento de la evasión fiscal y una vuelta más de tuerca a la competencia desleal.

La aparición de aplicaciones como Uber, Blablacar y Airbnb han supuesto una revolución en varios sectores. La primera de ellas sirve para unir a quienes deseen un trayecto en coche con los particulares que estén dispuestos a llevarlos por un precio predeterminado. la segunda hace lo mismo para trayectos largos y la tercera alquila alojamientos entre particulares.

En el primer caso se subieron a los árboles los taxistas, diciendo que no se podía permitir que el transporte urbano lo realizasen particulares sin licencia, pues para dar ese servicio ya cumplen ellos unos requisitos, pagan unas licencias y pagan sus impuestos.

En el segundo caso se encabronaron las compañías de transporte de viajeros, por la misma razón, porque si un particular te lleva de Madrid a París por 50 € (precios reales) y te lleva tranquilamente en su coche, ¿cómo diablos puede competir un autobús o un tren?

En el tercer caso, que es el que nos ocupa , por aquello de la vivienda y la hipoteca, protestaron los hoteles y los alojamientos turísticos, alegando que un particular no puede alojar en su casa a quien quiera, y que el alquiler de alojamientos turísticos es una actividad regulada que no puede ser desempeñada por un particular.

La verdad es que la cuestión es peliaguda, porque el Estado no  puede meterse nunca entre los acuerdos entre particulares, siempre que el bien que se preste sea propio y la voluntad de las partes esté clara, pero por otro lado, las autoridades entienden muy bien que de donde se cobran impuestos es de dónde las actividades ¡se realizan con un alta fiscal, una licencia y un negocio en regla.

¿Qué hacer? Buscar medios de entorpecerlo.

Por ejemplo, la Comunidad de Madrid acaba de prohibir que se ofrezcan alquileres de pisos y viviendas vacacionales por menos de 6 noches. Para plazos inferiores a seis noches el único contrato válido será el de los estalecimientos hosteleros.

Baleares ha seguido esa estela y obliga a que loa vecinos del inmueble den su consentimiento para que se pueda alquilar como apartamento vacacional (norma de dudosa legalidad a mi juicio) y que el inmueble tenga más de cincuenta y cuatro años. Los inmuebles nuevos, quedan excluidos.

Las espadas siguen en todo lo alto, y no parece fácil combatir la piratería, o falta de licencia legal, según se mire, en cada vez un mayor número de sectores.

Por cierto: también hay una para guisar en casa y que la gente se apunte a tu menú, si le gusta lo que ofreces. Ya veréis cómo se ponen los restaurantes en cuanto la cosa se extienda…

Seguiremos hablando del asunto

Hipoteca y recuperación

La historia es un poco vieja, pero vale..

La historia es un poco vieja, pero vale..

Que sí, que yo entiendo que la mitad de le economía se basa en las expectativas, y que convencer a la gente de que la cosa va mejor es el primer paso para que la economía se mueva un poco, tanto por el lado de la oferta como el de la demanda.

Mientras el sentimiento general sea que pintan bastos, los que tienen algo para invertir no lo harán, esperando un momento mejor, y los que todavía tienen algo de dinero para gastar preferirán esperar a más adelante, ya sea para conseguir mejores precios o por la precaución del vete a saber.

Lo entiendo y es la base teórica de la deflación: el aplazamiento de las decisiones de inversión y consumo. El aplazamiento conduce a la paralización, eso al desempleo, y de ahí a la espiral destructiva de la economía. Todo muy clásico y ortodoxo, vaya.

Por lo tanto, desconfiar de la recuperación puede ser una idea insolidaria, antipatriótica y antisocial, Pero, puñetas, seamos serios:

-Estamos con el tipo de interés cercano al 0% y el interbancario en cifras negativas. Si la economía se recupera, ¿cómo es que los bancos emisores están metiendo doping monetario en vena de ese modo?

-La deflación es mayor problema que la inflación. El mandato del BCE es controlar la inflación, pero ahora pelea con el problema contrario.

-Hemos metido putas y drogas en el PIB y aún así no crece. El PIB, medios por medios indirectos, es muy inferior al oficial, y eso hace desconfiar, y mucho, de todo lo que cuenten después.

-Dicen que hay crecimiento de la economía pero no del nivel de precios. 

-La población que trabaja baja en 600.000 personas. No sabemos si se han muerto, se han jubilado o han emigrado. Pero el hecho es el que es.

-El precio de la vivienda, que es el principal activo de capital y ahorro, sigue cuesta abajo. Y de momento sólo se habla de buenas noticias cuando se menciona el atenuamiento de su caída, que no es lo mismo que su recuperación.

-El endeudamiento del sector público crece a un ritmo anual cercano a los ochenta mil millones de euros.

Si estos datos los extrapolásemos a un hospital, con el enfermo en la UVI, ningún médico medio sensato diría a la familia del enfermo que lo más probable es que llegue a las rondas clasificatorias del próximo Decathlon olímpico.

Y Rajoy es lo que nos dice. Nos cuenta, sacando pecho, que de estos datos del paro era de los que quería informar hace tiempo. Lo malo es que ya estamos en un momento en que los datos del paro carecen del valor social y político que tenían en otros momentos.

La gente ha dejado de escuchar lo que escuchaba y ya ni eso sirve, realmente, para creer en la recuperación. Ahora toca pagar la hipoteca, apretar los dientes y callar.

O rezar, quien aún crea en algo.

Inteligencia y mudanza. Estudios para todo

Cortando por lo sano

Cortando por lo sano

Como empieza el verano, o eso decían antes que me cayera un chubasco de todos los demonios, creo que hay que mejorar un poco el humor y relajar el tono tremendista. Al fin y al cabo hablamos de hipotecas, y no de enfermedades mortales.

Como ya sabéis, hay estudios para todo. Estudios, casi siempre pagados con fondos públicos y que sirven para que Fulano o Mengano se saquen su título de doctor con tesis del tipo “la importancia del acento circunflejo en le francés bajomedieval de Borgoña”. ¿Que me he pasado? Ojalá: semejante tesis existe y ni siquiera me la he tenido que inventar.

Pues bueno: uno de esos estudios dice ahora que las personas con mayor inteligencia tienen una tendencia más acusadas a cambiar de vivienda, y que cuanto menor está capacidad intelectual del individuo, con mayor ahínco se apega a su lugar de residencia. Lo dice un tal Markus Jokela, y lo dice en la Universidad de Helsinki.

El trabajo ha consistido en un análisis de los movimientos migratorios interiores en los últimos cincuenta años y la conclusión es que la gente con mayor inteligencia suele mudarse de los pueblos o las ciudades pequeñas a el centro de ciudades más grandes para, una vez alcanzados sus objetivos personales y profesionales, buscar de nuevo una mudanza hacia el extrarradio de esas grandes ciudades o el regreso paulatino a sus lugares de origen.

Yo, que no he hecho ningún estudio, os aporto también una visión personal sobre la emigración en el medio rural: marcharse requiere osadía, capacidad de sacrificio, capacidad de aprendizaje para nuevos trabajos o idiomas y una buena dosis de inteligencia emocional para lidiar con situaciones desconocidas. Por tanto no es de extrañar que se marchasen quienes se viesen con más posibilidades y prefiriesen quedarse los que no veían claro todo ese montón de requerimientos.

En cuanto al estudio escandinavo, ignoro cómo estará el tema de las hipotecas en Finlandia, pero tengo que darle la razón a nivel español: aquí, el que consigue una hipoteca, consigue salir de casa de sus padres o consigue mudarse a una residencia mejor, la mayor parte de las veces es un lince. No se puede negar.

 

El estacazo que se prepara contra la vivienda. Un extraño impuesto sobre la inflación

Política fiscal

Política fiscal

La clase dirigente lo tiene claro: buena parte de nuestro problemas y de la burbuja hipotecaria proceden de eso que se dio en llamar “apetencia de capital” por parte de las clases medias y bajas.

¿Y eso qué es? Pues dicho en cristiano viene a significar que todo se jorobó el día que las clases medias y bajas dejaron de interesarse solamente por sus sueldos y su nivel de vida y empezaron a meterse en temas financieros, tales como bonos, acciones, mercados de capitales y e inversiones. Lo disfrazan de bonito porque la frase, en el fondo, significa que los pobres empezaron a meterse donde nadie les llamaba.

Ahora, y quizás por esa causa, se suceden las declaraciones y consejos sobre la necesidad de gravar la propiedad y no sólo la renta, seguramente porque las casas no son tan propensas a salir corriendo de un país como pueda serlo el dinero u otras formas de riqueza.

¿Y qué creéis que ha pensado nuestro ínclito Gobierno, ahora, en plena reforma fiscal? Pues m´ñas o menos lo mismo, pero tratando de disimular la cosa para que la gente no se cabree, ya que el año que viene es año electoral.

Al leer la letra pequeña de la reforma, nos encontramos con algunas joyas que van a afectar, y mucho, al mercado de la vivienda. Por ejemplo, y es crucial, Hacienda elimina los coeficientes de inflación y actualización que corregían a la baja las plusvalías y por lo tanto reducían de manera muy sustancial  la tributación en el Impuesto de la Renta por la venta de un inmueble.

Lo explico: antes, pagabas plusvalías pro la diferencia entre el valor al que compraste una vivienda y el valor por el que la vendías, ya que eso se consideraba plusvalía. Pro claro, como los dineros del año noventa no valen como los de hoy, había una serie de coeficientes de actualización. Esos coeficientes son los que desaparecen en muchos casos, o se reducen en otros, para que pagues el gran estacazo cuando vendas, porque se entiende que tienes unos beneficios muy superiores a los que disfrutas en realidad, ya que buena parte de la subida no es enriquecimiento, sino inflacióm

En principio parece una medida que va exclusivamente contra el vendedor, pero estas cosas siempre se trasladan al mismo: al pagano.

Si, ya sé que parece una barbaridad, pero el caso es que va en serio…

Heredar una casa en España

tabla-impuestos-herencia-mundial

Una vez más, y le he cogido gusto, empiezo con un diagrama gordo, sacado esta vez de Idealista. com.. Se trata de la tabla  comparativa  de los impuestos que se pagan a nivel mundial por las viviendas heredadas.

En el caso de la hipoteca, la cosa está mucho más clara: el valor hipotecado se resta del valor tasado de la vivienda, con lo que el palo impositivo puede minorarse, pero no acaba de desvanecerse tampoco.

El caso es que en España se pagan algunos de los mayores niveles tributarios a nivel mundial para el caso de heredar una vivienda, lo que no deja de desincentivar el uso de la propiedad inmobiliaria como acumulación de riqueza. Este fenómeno, que no juzgo a nivel político, es una traba más para el desenvolvimiento y resurrección de la construcción en nuestro país, porque fuere de lo justo o injusto del hecho, la cuestión real es que se construye una casa quien puede, y si a quienes pueden les ponemos trabas, tenemos que quedarnos con lso que no pueden. Es decir, con nada.

Según podemos ver en la tabla, en España se llegan a  imponer tasas del 13,55% a personas que hereden una propiedad de 500.000 euros,  mientras la media global se sitúa en un 3,5% por una propiedad del mismo precio. La agravante del asunto, que nos aleja de los grandes fondos de inversión y dificulta la salida del hoyo de nuestro sector inmobiliario, es que esas tasas no son homogéneas, sino que dependen del capricho delas comunidades autónomas, que legislan como buenamente les parece al respecto, compitiendo entre ellas para atraer fortunas o vot0s populistas, según el humor con que se levanten.

Una vez más, debo incidir en la distinta percepción que de este asunto se tiene dentro y fuera de nuestras fronteras: aquí, tal vez nos haga gracia que sea mejor morirse en la Rioja que en Andalucía, o mejor morirse en Madrid que en Asturias, pero cuando los inversores internacionales analizan estas cosas se limitan a marcar con una cruz la casilla de “falta de seguridad jurídica”, o la de “disparidad legislativa”, y perdemos inversión exterior a raudales.

Lo que se pretende, con el tiempo, es que el Tribunal Constitucional iguale todas estas diferencias basándose en el principio fundamental de que todos los españoles debemos ser iguales ante la ley, pero hasta la fecha, y pronostico yo que por mucho tiempo, esto va a ser de difícil aplicación, ya que muchas regiones del país basan su identidad en ser distintos, y a ser posible, mejores que sus vecinos.

Un despelote, vaya.

 

Hipotecas sí, pero ¿para quién?

Pisos, sí, pero no para todos

Ya llevamos varias semanas resaltando este hecho que no hace sino proteger a las propias entidades financieras ante otro posible fiasco económico en el futuro y, no nos engañemos, acaba por protegernos también a los ciudadanos que, en demasiadas ocasiones, nos dejamos cegar por el becerro de oro y caemos en las redes de los bancos y cajas con su crédito fácil.

Con esta selección más eficaz y pertinente de todo lo relacionado con el perfil financiero de los posibles candidatos a obtener hipotecas se conseguirá que en el futuro las crisis no sean tan duras con este sector, ya que los ciudadanos que sí están accediendo al crédito hipotecario lo hacen con las espaldas bien cubiertas.

Ello supone, no hay duda, que una gran parte de la ciudadanía se queda fuera de las reglas del juego y se tienen que decantar por el alquiler en lugar de por la compra, una opción claramente mayoritaria en el resto de Europa pero que aquí, por un cariz puramente cultural, no ha calado hondo entre nosotros que seguimos prefiriendo comprar a alquiler.

Por tanto, el futuro que nos espera es bastante claro en el corto-medio plazo. Poco a poco los ciudadanos iremos comprendiendo que solo podemos aspirar a alquilar en lugar de a comprar, las hipotecas quedarán para unos pocos que sí se lo pueden permitir y el conjunto de la economía española estará más protegida ante nuevos ciclos adversos.

¿Es bueno o malo que no todo el mundo pueda comprar?

Sin duda, es bueno, porque no es lógico mantener el elevado porcentaje de ciudadanos que compraban una vivienda años atrás, incluso en sus primeros años laborales. Es decir, antes de lograr la estabilidad laboral ya habían conseguido ser propietarios de una vivienda, algo totalmente impensable en el resto de Europa y del mundo en general.

En definitiva, algo que podría entenderse como negativo, al evitarse que todo el mundo pueda llegar a obtener préstamos hipotecarios podría convertirse en algo positivo desde el momento que pueda proteger el sistema ante futuras crisis venideras.

Propuestas novedosas sobre hipoteca y vivienda

Que dice que puede

Que dice que puede

Las recientes elecciones europeas han supuesto un pequeño terremoto en el escenario político español. Digo terremoto porque los grandes partidos han perdido del orden de cinco millones de votos y el sufragio se ha fragmentado hasta el punto de que España enviará al parlamento europeo representantes de hasta diez formaciones políticas. Y digo pequeño porque, contra viento y marea, contra todo lo esperado, ha vuelto a ganar el Partido Popular, y ha ganado unas elecciones en las que todo el mundo vota un poco al voleo, por aquello de que el parlamento europeo hace como que decide cosas, pero los que verdaderamente cortan el bacalao son los gobiernos nacionales.

Y dentro de este terremoto, lo más comentado está siendo la irrupción de Podemos, una formación radical de izquierdas que en sólo cuatro meses ha conseguido reunir en torno a su programa, o la figura de su líder, más de un millón de votos.

En el programa de esta formación, la vivienda y la hipoteca desempeñan un papel preponderante, así que vamos a ver qué es lo que propone este nuevo partido sobre el tema que ocupa a este blog, aunque sólo sea para ver de dónde vienen lso vientos y qué es lo que ha apoyado un millón y pico de personas.

-1-Recuperación del impuesto de patrimonio, con un mínimo exento para la vivienda familiar en función de la renta y sin exenciones para segundas viviendas.

Yo siempre he creído que el impuesto sobre el Patrimonio es doble tributación, pero vale. Parece razonable tal y como se plantea.

-2-Establecimiento de garantías reforzadas a nivel europeo para garantizar la protección efectiva del derecho a la salud, la educación, la vivienda, la jubilación, etc…

Sobre esto, ya escribí un artículo hace tiempo, así que permitidme que cite a los clásicos y tal.

-3-Adopción de un plan europeo de vivienda basado en la creación de un parque de viviendas públicas y de alquiler social, con incorporación de las viviendas vacías al parque público, gravando con impuestos los inmuebles vacíos no ofrecidos en alquiler social.

Opino que habría que hacer otro tant0 con los novios y novias infrautilizados, porque hay mucha gente necesitada de abrazos, por decirlo finamente. Pero vale.

-4- Acceso preferente al alquiler social para todos los ciudadanos sin techo y en situación de exclusión social, los jóvenes que abandonan el hogar paterno, madres solteras, mujeres maltratadas y otros colectivos con especial necesidad.

Cuando las desgracias otorgan derechos, todo el mundo se busca una desgracia. Y si no la encuentra, la crea. Pero en principio, lo reconozco, suena bien.

-5- fomento del alquiler frente a la adquisición en propiedad, otorgando subsidios familiares de vivienda en función de la renta.

Salvo por lo de los subsidios, que todos sabemos en qué acaban, lo aplaudo sin reservas.

-6- Consideración del suministro de luz, agua y calefacción como un derecho básico inalienable, que debe ser garantizado por parte de empresas públicas.

Creo que aquí empieza el festival de piruletas.

-7- Actualización de los padrones y registros de la propiedad vinculados a los servicios de agua, gas y electricidad para conocer el uso de las viviendas y para crear un registro de viviendas desocupadas.

Insisto en lo del padrón, también, para novios y novias con poco uso, extendiéndolo progresivamente a cónyuges.

-8-plan de rehabilitación energética de edificios y de viviendas con objetivos anuales que permita un ahorro estimado para el sector del 50% de su consumo energético respecto al nivel de 2009, sin que todo ello suponga incremento de los precios de alquiler.

¿Un 50% de ahorro energético y sin incrementos de precios? Dios los oiga, y tal…

-9-Limitación de las actuaciones administrativas o judiciales a la devolución del uso al legítimo propietario en caso de que dicho inmueble resulte necesario para el uso o sostenimiento de su unidad familiar.

Esta medida viene a decir que si alguien tiene que quedarse en la calle es el hijo del propietario. Todos los demás tienen algún derecho sobre esa vivienda.

-10- Reorientación de instituciones como el frob y la sareb para convertirlos en instrumentos dedicados a la recuperación de las ayudas públicas concedidas a la banca.

Mi aplauso sin reservas.

-11- Moratoria de la deuda hipotecaria sobre primeras viviendas de las familias con dificultades para afrontar el pago de los préstamos, y cancelación inmediata de la misma en los casos en que haya prácticas fraudulentas o con probada mala fe por parte de las entidades financieras.

Si se define bien lo que es eso de una dificultad para pagar, no lo veo mal, aunque los que más lo van a celebrar son los que trabajan en negro, porque además de no pagar impuestos tampoco pagan la hipoteca.

-12- la reestructuración de la deuda incluirá la corrección de su valor en función de la corrección del precio de la vivienda hipotecada (en especial en caso de pérdida de su valor), y las letras no superarán el 30% de los ingresos familiares, garantizando un nivel de vida digno.

Est0 es una versión progre de la ley del embudo, porque cuando la vivienda subía y la vendíamos, estábamos todos contentos. Pero si baja, que se joda el banco. A veces somos la leche…

-13- Establecimiento de mecanismos de condonación de la deuda para paliar la situación de emergencia habitacional.

Eufemismo por no pagar, y tal. La razón ya se irá encontrando.

-14-Paralización inmediata de todos los desahucios de primeras viviendas y de locales de pequeños empresarios

-15- Despenalización de la ocupación por parte de familias o personas en situación de vulnerabilidad o sin techo de viviendas vacías pertenecientes a bancos y cajas intervenidos o rescatados, o de viviendas vacías durante más de un año de inmobiliarias y promotoras.

Esta es como la ley de la patada en la puerta de Corcuera, pero del otro lado. Creo yo.

En resumen, como veis, el tema de la vivienda y la hipoteca sigue ocupando el centro del debate político en España. En este caso, da la impresión de que hay gente por ahí que espera que venga el rey de los elfos a pagar la cuenta, pero no cabe duda de que es bueno que haya quien se preocupe del asunto, más allá del fatalismo y la resignación.

Ya no solo se venden las viviendas de costa

Y no simplemente filetes

Y no simplemente filetes

Llevábamos unos años con la cantinela de que los inversores internacionales aprovechaban la caída de los precios en las viviendas de las zonas costeras para realizar inversiones a medio-largo plazo, haciendo uso de su mayor poder adquisitivo con respecto al comprador medio español, de manera que estas zonas se estaban convirtiendo en auténticos nichos para alemanes y rusos.

Sin embargo, la caída de precios se ha ido generalizando al conjunto de España y ha alcanzado a las grandes ciudades, hasta ahora tabú para estos compradores internacionales, pero que han sabido entender que ahí puede estar el verdadero negocio, a poco que el precio de la vivienda comience a recuperarse en breve, que lo hará, al menos en estas ciudades.

Así, con viviendas en Madrid que han caído cerca del 20-30% de su valor, mucho más si nos movemos a zonas de la periferia de la Capital, es evidente que hay una clara ganancia en ciernes ya que este precio terminará por recuperarse debido a la ingente demanda de vivienda que siempre existe en los grandes centros urbanos.

En definitiva, se trata de un negocio redondo para todas aquellas personas con los suficientes fondos como para hacer frente al pago de estas viviendas sin tener que incurrir en los abusos de las entidades financieras con los diferenciales. De esa manera consiguen el beneficio máximo, beneficiarse del futuro aumento de precio sin sufrir la actual situación bancaria.

Basta con echar un vistazo a las estadísticas del INE para comprobar que esta tendencia que ya venían advirtiendo los profesionales del sector se está convirtiendo en una realidad. Estos datos nos hablan de un creciente número de compradores internacionales haciendo inversiones en los grandes centros urbanos, como Madrid o Barcelona.

Hay que tener en cuenta que el precio de la vivienda de costa tiene un evidente límite de crecimiento, ya que la demanda para este tipo de inmuebles siempre está supeditada a la situación económica, mientras que los pisos en las grandes capitales tienen su propia demanda independientemente de la situación económica en la que nos encontremos, y ahí está el gran beneficio en ciernes.

¿Se prepara un nuevo impuesto a la propiedad?

Agujero presupuestario

Agujero presupuestario

Cuando la fiera está hambrienta, no pone muchos reparos a la presa a la que puede echar el diente, ni tiene mucha memoria a la hora de recordar a sus votantes,sus promesas o eso a lo que en su día llamaban principios y se han demostrado simples pretextos.

Por mucho que nos cuenten que van a bajar impuestos, por mucho que nos digan, incluso, que de momento no los van a subir, el caso es que tienen que recortar el déficit y para ello van a intentar incrementar los ingresos, porque de reducir el gasto no hablan siquiera.

¿Y de dónde van a tirar para incrementar los ingresos? Pues de donde se pueda, por supuesto. El IRPF no lo pueden exprimir mucho más, porque los ciudadanos asalariados son cada vez menos y con más dificultades para llegar a fin de mes. El Impuesto de Sociedades no se puede tocar, porque las empresas no tienen mayor problema en largarse a donde les cobren menos. El IBA es una opción, y posiblemente la tocarán, ya sea incrementando el tipo general al 23% o eliminando artículos de la cesta de bienes favorecidos por el IVA reducido o super-reducido.

¿Y qué les queda entonces?  ¿El alcohol, el tabaco y las gasolinas? Esa cuerda ya da para muy poco, con las reducciones de consumo que hemos visto.

Les queda la Propiedad, y el Ministerio de Hacienda repara algún nuevo tipo de tributo que grave la propiedad, muy especialmente de viviendas, que son las que sus dueños no se pueden llevar debajo del brazo. No se conforman ya con cobrar Transimisiones Patrimoniales (un verdadero estacazo), los derechos sobre las hipotecas y el IBI anual: ahora buscan el modo de que el propietario pague un impuesto anual sólo por el hecho de serlo, ya sea considerando la vivienda como un rendimiento computable en el IRPF, eliminando todas las deducciones existentes hasta la fecha o creando un nuevo impuesto totalmente nuevo, que castigue la tenencia de inmuebles.

Lo peor de todo es que de estas cosas noi tenemos que enterar leyendo los documentos que el Gobierno envía a Bruselas, porque aquí no dicen ni mu. Cito textualmente: “El Gobierno estudiará diversas alternativas, entre otras posibles, la imposición sobre la propiedad, la imposición medioambiental con el menor impacto posible en la competitividad, procedimientos de pago por uso de servicios, el incremento de los impuestos por uso frente a los que gravan la transmisión de la propiedad o la imposición sobre el sector financiero en el marco armonizado de la UE”.”

Cuando se ven obligados a hablar claro, se retratan…

 

 

La burbuja inmobiliaria China

vivienda en China

El otro día hablábamos de la burbuja inmobiliaria británica y de cómo no se libran del condenado fenómeno ni esos tipos tan flemáticos y sensatos que son los ingleses. Hoy, para seguir con el recorrido y demostrar que las burbujas inmobiliarias son un fenómeno universal vamos a ver el otro caso, el de China, mucho más preocupante que el anterior por las repercusiones económicas y financieras que podría tener para el resto del mundo.

Como sabéis, suelo ilustrar los artículos con alguna foto alusiva y un pie que la explique desde la ironía, pero en esta ocasión creo que es necesario usar una gráfica como apoyo, sin cachondo alguno, y un poco más grande de lo habitual. Echadle un ojo detenidamente, por favor.

El despegue de la economía China y su papel preponderante como nueva potencia económica ha atraído gran cantidad de capitales del exterior, y no sólo destinados a aumentar la producción industrial y deslocalizar la industria occidental. Muchos de esos capitales aguardan una buena oportunidad de inversión y entre tanto se colocan en el sector inmobiliario, que ha sufrido un enorme auge en el país debido a la enorme migración de personas del campo hacia las ciudades. Hablamos de casi ciento cincuenta millones de personas en veinte años, aunque algunos mencionan cifras mucho más abultadas.

El crecimiento anual de China es de alrededor del 7,7% y la balanza comercial positiva junto al mercado inmobiliario son las grandes bazas del gigante asiático. El Gobierno chino, además, lleva años jugando al cubilete con el valor de su moneda para intentar atraer capitales extranjeros, así que no es de extrañar que al final se haya producido una enorme acumulación de dinero tras sus fronteras.

El problema, por supuesto, es que ese dinero está allí a título de préstamo y que en algún momento los que lo pusieron querrán recuperarlo. La conclusión final es que China es ahora  uno de los países más endeudados del mundo con un 215% de su PIB en deuda (según datos del Banco Popular de China, correspondiente a un 75% en deuda pública y un 140% del PIB en privada).

¿Y qué está sucediendo? Que la larguísima crisis de Occidente está impulsando a algunos de esos inversores a intentar deshacer sus inversiones, lo que unido al debilitamiento de la demanda ha hecho que la bolsa china lleve tres años seguidos de caídas y la vivienda ya haya iniciado la cuesta abajo, como podéis ver en la gráfica.

Si se confirma el estallido de la burbuja china, que es justamente lo que yo preveo, la crisis de las hipotecas subprime va a ser una broma de niños comparada con la crisis de la hipoteca china.

Veremos en unos meses.