Archivo de la etiqueta: embargos

Hipoteca y retraso judicial

Denunciante en la sala de espera

Denunciante en la sala de espera

Es una idea generalizada pero que nadie parece querer escuchar: el retraso en la justicia hace que al final cualquier resolución sea siempre injusta, por tardía. Entre la acumulación de garantías, la extensión de los plazos, la cantidad de gente que se pasa media vida intentando retrasarlo todo y el sistema decimonónico que aún impregna nuestros tribunales, lo cierto es que la resolución de los casos se eterniza.

¿Y qué ocurre? Que las hipotecas no esperan.

Hace unos pocos días saltaba a la luz la noticia de que algunos juzgados estaban dando fechas de 2014 para resolver casos de despido procedente o improcedente, con lo que el trabajador despedido tendría que esperar tres años para saber si cobra indemnización y cuánto va a cobrar.

Lo mismo sucede, más o menos, con los desahucios por impago, que tardan meses o incluso más de un año, haciendo así que los propietarios prefieran no alquilar sus viviendas o cobren por ellas mucho más de lo normal, en previsión de encontrarse en este especie de callejón sin salida que es acudir a la Justicia.

Según explica en su informe trimestral el Consejo General del Poder Judicial, estos retrasos se están acumulando con mayor frecuencia y dilación en todo lo referente a desahucios, embargos, despidos, concursos de acreedores, reclamaciones de cantidad. Si encima te toca lidiar con una administración pública, la cosa es aún peor, porque los contenciosos administrativos pueden prolongarse hasta seis años.

Por supuesto, a algunos puede parecerles que es buena noticia que se retrasen los desahucios, pero el hecho es que la impunidad no beneficia a nadie, y menos aún a quienes pretenden cumplir puntualmente con sus obligaciones.

Y el retraso es siempre injusticia y muchas veces impunidad.

Quizás sea el momento de pensar en otro tipo de soluciones, especialmente en temas tan sensibles como el trabajo. La más utilizada fuera de nuestras fronteras, y con mejores resultados, es el arbitraje. Mediante el arbitraje ambas partes se ponen de acuerdo en nombrar a un tercero que dictamine sobre su caso y a aceptar su decisión. Es más barato y más rápido, pero tengo la impresión de que precisamente por eso lo rechazan algunos: porque no quieren justicia, sino marear la perdiz.

Justo, mira por dónde, lo que más perjudica a la gente de a pie y más beneficia al que tiene recursos para seguir, mientras tanto, pagando su hipoteca.

Los embargos no se detienen

El temido cartel que aquí no nos ponen...

El temido cartel que aquí no nos ponen...

Supongo que estos informes habrá que tomárselos con la máxima prudencia, porque proceden de parte interesada, pero tras un pormenorizado estudio, la Asociación de Afectados por Embargos y Subastas (AFES) afirma que casi una de cada cinco hipotecas firmadas entre 2004 y 2008 están en peligro de convertirse en embargos y desahucios.

Para que los números gordos nos ayuden a valorar el problema en su verdadera magnitud, más de setecientas mil viviendas de los casi cuatro millones de hipotecas que se firmaron en aquellos años dorados pueden haber sido ejecutadas a finales de 2014 o principios de 2015.

Según este mismo informe, hasta la fecha se han producido ya 171.000 embargos, a los que hay que sumar una cifra muy similar de viviendas en proceso de ejecución hipotecaria. A esta cifra hay que sumar otros trescientos setenta y cinco mil embargos que se prevén para antes de que acabe 29013. Se toma como base para este cálculo la relación entre el coste de las letras mensuales y la renta media de las familias, muy afectada por la incidencia del desempleo.

En total si hacemos cuentas, resulta que las viviendas afectadas por esta clase de procesos rondará una cifra muy similar a todas las hipotecas que se firmaron durante 2004. Y para colmo de males, AFES aclara, curándose en salud, que estas cifras contemplan sólo el escenario más favorable, es decir, que el paro y la crisis se queden como están, porque si llegamos a ver una depresión mayor, como algunos vaticinan por los problemas de la deuda soberana, entonces las cifras podrían ser peores.

Mientras tanto, se estudian fórmulas para que los bancos no tengan que quedarse con los pisos al tiempo que consigan mantener una mínima solvencia en sus balances, ya que de lo contrario la falta de crédito acabaría de estrangular cualquier conato de recuperación económica.

Y que eso es lo que sucede con las grandes borracheras: que tienen grandes resacas.

Más desahucios que nunca

A los tribunales hemos de ir

A los tribunales hemos de ir

Parece que los efectos que la crisis económica está produciendo en el sector inmobiliario están todavía muy lejos de desaparecer, a juzgar por el nuevo máximo que han marcado los desahucios solicitados durante el segundo trimestre del año, superando al primer trimestre, durante el cuál también se marcó un máximo histórico.

Durante los meses de abril, mayo y junio se solicitaron un total de 16.464 desahucios a los tribunales españoles, lo que supone un incremento del 21,2% con respecto al mismo período del año anterior, y una importante subida con respecto al récord anterior, marcado entre los meses de enero, febrero y marzo de este mismo año, cuando el total de desahucios solicitados ascendió a 15.546, con un incremento interanual del 36,8%.

Para que nos hagamos una idea de la gravedad de la situación, contabilizando los primeros seis meses del año ya hemos alcanzado al total de desahucios solicitados durante todo el conjunto de 2009, 33.918, y nos encontramos a tiro de piedra de los desahucios solicitados a los tribunales durante el año 201o, con 47.809, que supuso un récord histórico que ahora mismo se encuentra a punto de ser superado.

Sin embargo, no todo son malas noticias, y parece que se empiezan a atisbar ciertos resquicios de recuperación marcados por las peticiones de ejecuciones hipotecarias, que son el paso previo a los desahucios. Para que nos hagamos una idea las ejecuciones hipotecarias pueden terminar en desahucio aunque también pueden hacerlo en otras alternativas.

En este sentido, durante el segundo trimestre de este año 2011 se ha producido un retroceso del 16,4% en la petición de ejecuciones hipotecarias con respecto al mismo período de 2010, totalizando un número de 20.505. Si ampliamos los datos al conjunto del semestre la reducción es aún mayor, con una caída del 18,96%, totalizando un volumen global de 42.242 solicitudes de ejecuciones hipotecarias.

En definitiva, y si nos atenemos a los datos ofrecidos por el Consejo General del Poder Judicial, nos encontramos con que durante lo que queda de 2011 seguiremos sufriendo un continuo crecimiento en el número de desahucios, con posibilidad de retroceso a partir del año 2012.

No es que sea una gran noticia, pero es lo que hay, y mejor conformarse con poco que tener que conformarse con nada.

A partir de noviembre, subastas para todos

Ahora se podrá hacer con un click en vez de con un martillazo.

Ahora se podrá hacer con un click en vez de con un martillazo.

La verdad es que es para celebrarlo, y no tanto el que haya montones de viviendas para subastar, que eso sería una canallada, sino el hecho de que se rompa al fin el manto de oscurantismo y silencio de subasteros, bancos, y otros ventajistas similares que hasta ahora venían aprovechándose de la dificultad para conocer los bienes que se subastaban.

Francisco Caamaño, ministro de Justicia,  presentó hace unos días el que será portal de de subastas judiciales en la Red, y en él saldrán a la venta los inmuebles embargados por los bancos. La idea es que las subastas sean más participativas y tengan mayor demanda, lo que puede llegar a aliviar la carga de los embargados en una media de un 25 %.

Porque ya sabéis cómo va esto: no pagas, así que te embargan. Luego subastan el piso, y como sacan una birria por él, porque se lo adjudican a un mangante o se lo adjudica el propio banco por el 50% del precio de salida, te quedas sin casa pero con una deuda de tres pares de narices.

De este modo, los bancos tendrán más oportunidades de librarse de los pisos, y todo el mundo, el que quiera, podrá buscar una vivienda que le interese, y creo que con la conciencia muy tranquila, porque si no aparece comprador será el banco o el subastero el que se quede el inmueble y muy a la baja.

La única pega es que de momento sólo se implementará este sistema en las comunidades donde el Ministerio de Justicia conserva competencias. O sea, en Murcia, Castilla y León, Casilla-La Mancha, Murcia, Baleares y Extremadura.

Ya está funcionando a prueba en Murcia.

Os dejo el enlace:

https://subastas.mjusticia.es/subastas/home.do

Suben el precio mínimo de salida en las subastas de pisos embargados

Te lo dejo en cuatro perras, que es de un embargo...

Te lo dejo en cuatro perras, que es de un embargo...

El viernes hablaba de los cambios legislativos en torno a las hipotecas y de cómo se había modificado la cantidad máxima embargable del salario de una persona para cubrir una deuda hipotecaria. Tenía la cuestión sus más y sus menos, como todo, y dejábamos pendiente para hoy el otro cambio normativo.

Porque es importante: han elevado del cincuenta al sesenta por ciento del valor de tasación la cantidad mínima a la que se puede adjudicar en subasta un piso embargado.

Hasta ahora, el procedimiento el el que sigue: después de no pagar una serie de cuotas, normalmente seis o más, el banco iniciaba un procedimiento de apremio, y tras no conseguir satisfacción económica del hipotecado, solicitaba el embargo del piso.

Una vez embargado el piso, y tras los trámites oportunos, se subastaba la vivienda, de modo que lo obtenido en esta subasta se destinaba a pagar la deuda. Lo que quedaba, si quedaba algo a mayores, era para el hipotecado, y si quedaba un saldo negativo, era y es lo que seguía debiendo el hipotecado después de perder la casa.

Lo vemos con un ejemplo: Tenías una hipoteca de trescientos mil euros. Debías doscientos mil en el momento de dejar de pagar. Te embargaban la vivienda. Como podía sacarla a subasta por la mitad de lo tasado, la sacaban a subasta a ciento cincuenta mil. La adjudicaban a ese precio, y seguías debiendo cincuenta mil.

En teoría, el sistema era bueno, porque la pública subasta permite que el precio del bien se eleve si vale la pena, peor todos sabemos lo que es la picaresca y el canallismo de las subastas, con lo que casi siempre se adjudicaban las viviendas en el valor mínimo o de salida, haciendo un gran daño al hipotecado.

Con el cambio actual, que pasa del 50% al 60 % , y en el mismo ejemplo, no podrían adjudicar esa vivienda en subasta en menos de ciento ochenta mil. Es un paso tímido y apocado (como casi todos los que dan últimamente) pero es un paso en la buena dirección.: en la de defender los intereses del ciudadano por encima de los del banco, y sobre todo, por encima de los del subastero. Porque era el colmo.

Ejecuciones de pisos

Ejecuciones...

Ejecuciones...

Lo siento, pero no he conseguido enconrtrar una foto en la que estén fusilando un inmueble. Ni siquiera un local comercial, así que os tenési que conformar con la tapia de un cementerio, símbolo siniestro donde los haya.

Carguen, apunten, fuego.

A lo que estamos: la tercera parte de todas las ventas de viviendas registradas este año son ejecuciones bancarias. Todo el rollo sobre el despegue del número de transacciones se reduce al final a este truco macabro. O sea, que cuando nos cuentan que se han vendido tantos o cuantos pisos, hay que tener en cuenta que un tercio de esa cifra se debe a embargos, daciones en pago y otros procedimientos por los que el piso cambia de manos… pero para ir a parar a las manos del banco. Por supuesto, los genios que contabilizan simplemente el número de pisos escriturados no caen en la cuenta, o no quieren caer, de que también están en esa lista los pisos que caen en las garras de los ejecutores.

La estadística es lo que tiene: que nos dicen que a principios de este año se transmitieron 41.000 viviendas, y se anunció a bombo y platillo que eso suponía casi un 20 % más que el año anterior, lo que demostraba que el sector inmobiliario e hipotecario estaba alzando el vuelo, cantando el aleluya y secándose el pelo para salir de baile.

Luego, analizado en detalle, el dato nos indica en realidad que se ha vendido un 10 % menos de viviendas que el año anterior pero se ha disparado el número de embargos, daciones y ejecuciones hipotecarias.

¿Cómo lo veis?, ¿por qué no explican este tipo de cosas?

¿Puede ser cierto, como dicen algunos, que el hecho de que los bancos empiecen a aceptar daciones significa que tienen esperanza de vender esas viviendas?, ¿o no será, por contra, que quieren amarrar lo que puedan antes de que el descalabro sea completo?

Por mi parte, no veo clara la mejoría por ningún lado. Ni siquiera en los carteles de se vende pegados en las ventanas. No sólo no disminuyen, sino que cada vez amarillean más…

Quizás de miedo.

 

El pueblo se une para luchar contra la injusticia hipotecaria

El pueblo unido jamás será vencido

El pueblo unido jamás será vencido

Dice la teoría de la democracia que en las elecciones elegimos a nuestros representantes para que promulguen las leyes que demandamos como pueblo, pero del dicho al hecho hay un buen trecho, y al final nuestros representantes promulgan leyes al antojo de los grupos de interés, que son los que, al final, ponen y quitan cargos públicos.

La aparición de la crisis inmobiliaria no ha hecho más que confirmar esta situación, con peticiones desde diversos ámbitos para que los políticos tomaran medidas en favor del pueblo, y no de las entidades financieras (por ejemplo, Obama ha prohibido los embargos en Estados Unidos), pero todas estas peticiones han caído en saco roto, por la sencilla razón de que no provenían de un grupo de presión.

Pero hartos ya de esta situación, ADICAE Cataluña ha decidido recurrir a una figura jurídica poco conocida en nuestro ordenamiento, aunque sí muy utilizada en otros países, como es la Iniciativa Popular Legislativa, que, entre otras cosas, dio pie a la prohibición de las corridas de toros en esa Comunidad.

La principal propuesta que quieren incluír en esta ILP es la dación en pago como figura exigible en todo contrato de préstamo hipotecario, así como también una ley de sobreendeudamiento, que prohiba a las famlias sobrepasar cierto umbral de deuda.

Si el asunto prospera, tendrá el apoyo de la mayoría de la población que sigue ahogada por la situación crítica en la que se ha visto envuelta sin comerlo ni beberlo, por la excesiva especulación de las entidades financieras por medio mundo.

Sin embargo, no hay que olvidar la parte de responsabilidad que todos los ciudadanos tenemos en nuestra propia situación. Durante la época de burbuja inmobiliaria, todos quisimos vivir por encima de nuestras posibilidades, y los bancos y cajas se limitaron a alimentar un sentimiento que ya teníamos en nosotros.

Hoy, sobreviven sin problemas las familias que supieron administrarse adecuadamente y no cayeron en la vorágine consumista de la compra impulsiva de viviendas. Por ello, no hay que caer en la excesiva regulación y apelar a la responsabilidad personal de los ciudadanos.

El Parlamento, eso sí, debe de evitar que las entidades de crédito tengan las herramientas, que han tenido durante estos meses, para abusar de estos ciudadanos. Y como el Parlamento no lo ha hecho por sí mismo, es interesante que surgan iniciativas como la IPL.

Nos vienen las hipotecas a la americana

Que nos vienen, que nos vienen, que nos vienen las hipotecas a la americana

Que nos vienen, que nos vienen, que nos vienen las hipotecas a la americana

Y fíjate tú que con un título como este hasta yo mismo me habría puesto a temblar, teniendo en cuenta el lío financiero que tenían montado me temería lo peor, pero no, amigo, el hecho de que nos vengan las hipotecas a la americana es algo bueno.

¿Por qué?

La actual ley hipotecaria española establece que el individuo que subscribe una hipoteca lo hace con una garantía personal, es decir, tiene que hacer frente a la deuda que contrae con todos sus bienes, presentes y futuros.

Esto provoca que si te embargan el piso no saldes la deuda con el piso en sí, sino que además de perder el piso mantienes una deuda con el banco.

Imagínate que te concedieron una hipoteca de 100.000 euros basada en la tasación de tu piso en el momento de la concesión, e imagínate que el banco te embarga la vivienda por falta de pago. Pues bien, esta vivienda va a subasta y el precio que suele pagarse por ella es mucho menor que el valor real. Imagínate que se pagan 70.000 euros.

Entonces, aparte de haber perdido tu vivienda le seguirás debiendo al banco 30.000 euros que tendrás que devolver en cuanto tengas oportunidad de ellos.

Pero, ¿cómo funciona en Estados Unidos?

Allí la garantía es el objeto sobre el que se fundamenta el préstamo. Es decir, sólo tienes que responder ante el banco con la vivienda que hipotecas, de forma que si te la embarga tu deuda con el banco queda saldada.

Como te puedes imaginar la situación americana es mucho más ventajosa para el usuario, más ventajosa y más justa, claro está, y parece mentira que hasta ahora nadie se haya puesto manos a la obra para modificarlo.

La proposición de ley ha sido presentada por todos los grupos parlamentarios, salvo el PSOE, que ha votado en contra. Supongo que los socialistas tendrán muchos favores que devolver a las entidades financieras, porque si no es así no comprendo su voto negativo.

De todas formas, no debemos echar las campanas al vuelo todavía, porque de momento sólo es una proposición de ley, y ahora es el Gobierno el que debe redactar la ley correspondiente para que luego la apruebe el Congreso definitivamente (con el paso necesario por el Senado, claro está).

Así que, paciencia, que puede que para la próxima crisis ya lo tengamos resuelto.

Dos veces con la misma piedra, los bancos siguen dando el 100% en las hipotecas

¿Están los bancos tropezando con la misma piedra de nuevo?

¿Están los bancos tropezando con la misma piedra de nuevo?

El ser humano es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra, y los dirigentes de los bancos españoles son seres humanos, por lo que no es descabellado pensar que estén volviendo a tropezar con la misma piedra de los créditos hipotecarios de alto riesgo.

Según una información del Wall Street Journal, los bancos españoles han comenzado a ofrecer créditos hipotecarios por el 100% del valor de la vivienda, una práctica muy habitual antes de la crisis, y que dejó a muchas entidades con verdaderos problemas de liquidez y de deuda.

Se podía esperar que tras la mala situación que todas las entidades han pasado, los bancos hubieran aprendido la lección y que hubieran decidido no conceder jamás hipotecas tan elevadas, sin un seguro de reembolso pleno, como está ocurriendo ahora mismo. Evidentemente, la ligereza en la concesión no es tan elevada como antes, porque los bancos siguen con el grifo cerrado, pero aún así la situación está ahí.

Pero, ¿por qué los bancos están dando créditos al 100% del valor del inmueble? ¿Se han vuelto locos?

Evidentemente, no. Los gerentes de los bancos están intentando salvarse ellos mismos mediante un riesgo controlado. Uno de los principales problemas con el que se están enfrentando las entidades de crédito es que durante los picos más agudos de la crisis financiera se han visto obligados a embargar demasiadas viviendas.

Ahora se encuentran con un stock de viviendas excesiva que bloquea su liquidez a la hora de pagar sus propias deudas, por lo que necesitan deshacerse de ellas como sea, y la única forma posible es conseguir que los ciudadanos las compren lo antes posible.

Para ello necesitan concederles créditos, y la manera de hacer que las viviendas sean atractivas es ofrecer créditos hipotecarios al 100% del valor de la vivienda, con restricciones, evidentemente, a sus propias viviendas y a unos requisitos de solvencia financiera claros.

Por tanto, los bancos no se han vuelto locos, ni se están volviendo a equivocar, nada de eso. Están buscando la mejor forma de deshacerse del stock de viviendas que han acumulado y que están lastrando sus cuentas, sobre todo ahora que se ven obligados a provisionar por una cantidad mayor.

En definitiva, que puede ser buen momento para pasarse por tu entidad financiera y ver que te pueden ofrecer de la bolsa de viviendas que estén manejando en ese momento, seguro que consigues un buen precio y una financiación adecuada.

Hay Gobiernos que sí hacen algo, en el País Vasco se ayuda a las familias embargadas

Los que sí hacen algo

Los que sí hacen algo

No todos los Gobiernos españoles están instalados en la inacción como política económica, no todos siguen la estrategia de Zapatero de dejar las cosas pasar y esperar a que escampe la tormenta, por suerte, al menos para algunos ciudadanos, existen algunos gobiernos autonómicos que sí están haciendo los deberes y están haciendo todo lo que está en su mano para proteger al ciudadano de los excesos de las entidades financieras.

El mejor ejemplo es la política del Gobierno vasco, que a través del programa Bizigune está ayudando a aquellas familias que se vieron afectadas por un embargo y que tienen a sus miembros en paro, con el objetivo de que estas familias tengan, al menos, un lugar en el que vivir, y en el que empezar la vida de nuevo.

Gracias a este programa las familias se pueden beneficiar de alquileres que no superan, en ningún caso, el 30% de sus ingresos, con lo que se los pueden permitir, y pueden destinar el resto de su renta a otras necesidades primarais, como la alimentación, por ejemplo.

La pena es que esta política tan positiva no se extienda al resto del país y que tengamos que sufrir las consecuencias del Estado de las Autonomías, que ha conseguido crear ciudadanos de primera y ciudadanos de segunda, todo en función del signo político del gobierno que ocupe el sillón presidencial en la Comunidad Autónoma que te haya tocado residir.

No seré yo el que critique un país descentralizado, todo lo contrario, pero sí defenderé como el que más un país descentralizado con los servicios esenciales centralizados, porque de otra forma lo único que se consigue es dilapidar la igualdad social que se había alcanzado en nuestro país.

La educación, la sanidad, la defensa y las políticas de vivienda deberían de estar gestionadas íntegramente por el Gobierno Central, para asegurarse de que todos los ciudadanos tienen los mismos deberes y derechos, independientemente de su lugar de origen o de residencia, porque en ello consiste, precisamente, un país, en ciudadanos iguales ante la ley y ante los derechos.

Si no se hace esto ocurre lo que está pasando en el País Vasco, que unos pocos se aprovechan de unas políticas ventajosas, mientras que el resto miramos muertos de envidia deseando poder estar viviendo allí, en lugar de hacerlo en nuestras respectivas Comunidades Autónomas.

Hacer más difíciles los embargos, la nueva moto que nos vende el Gobierno

Los dirigentes socialistas terminarán vendiendo motos en un concesionario

Los dirigentes socialistas terminarán vendiendo motos en un concesionario

De un tiempo a esta parte ya he comprendido a lo que se van a dedicar los miembros del Gobierno de Zapatero. Una vez que salgan del Gobierno, una vez que el pueblo decida que quiere un cambio en sus dirigentes, ya sea cambiando de partido político, o ya sea con cambios en el mismo partido, los actuales dirigentes socialistas van a montar un concesionario, un concesionario de motos.

Porque cada poco tiempo intentan vendernos una moto, y hay que reconocer que son buenos en ello, porque mucha gente acaba creyéndoles, con lo que ganan tiempo sobre tiempo, y más tiempo aún.

La última moto la ha vendido la Ministra de Economía, Elena Salgado, en la sesión de control al Gobierno de ayer miércoles. La mujer que, supuestamente, maneja nuestras cuentas públicas dijo que el Gobierno estudiaría hacer más difíciles los criterios exigibles a las entidades financieras para poder embargar una vivienda.

¿Qué significa eso?

¿Qué significa que el Gobierno lo va a estudiar? ¿Me está diciendo, entonces, que hasta ahora no se lo habían planteado? Uno de los principales dramas de la crisis, y el Gobierno comienza a estudiar su solución, ¡ahora!

¿Y qué significa exactamente que lo va a estudiar? Pues significa que cuando quieran sacar una ley, cuando comiencen a aplicar esos criterios que ahora están estudiando, ya no habrá embargos, o sí, pero sólo a la gente irresponsable que no paga sus cuotas porque se gasta el dinero en otra cosa, no como los embargos de hoy en día, embargos a gente honesta que, simplemente, no puede pagar sus cuotas.

Una vez más, el Gobierno llega tarde a solucionar un aspecto de la crisis, estamos ante unos dirigentes incapaces de adelantarse a los acontecimientos, incapaces de comprender la situación en la que se encuentra el país y tomar las decisiones necesarias para resolverlas.

O, peor aún, puede que los dirigentes socialistas que nos gobiernan en la actualidad no sean lentos de acción y de comprensión, puede que estén atados de manos por los intereses creados por las entidades financieras, lo cuál sería aún peor.

La complacencia del Gobierno con los bancos y cajas da que pensar que no quieren actuar contra ellos, y realizar una nueva reglamentación que dificulte los criterios para poder embargar una vivienda por impago es un ataque directo a estas entidades que, por lo que parece, tanto poder tienen sobre el Gobierno.

Por tanto, la inacción de Zapatero y de los suyos se puede deber a dos motivos: incompetencia o miedo a la banca. ¿Qué es peor?

Nos engañan como a niños, gran parte de los embargos se podían haber evitado

Los ciudadanos somos juguetes rotos en manos de las entidades financieras

Los ciudadanos somos juguetes rotos en manos de las entidades financieras

Somos meros juguetes rotos en manos de las entidades financieras que hacen de nosotros lo que quieren, para ellos no contamos, somos simples números al final de un expediente en el que se indica lo que debemos y con la asiduidad con la que nos retrasamos en el pago, pero nadie aparece para ayudarnos cuando lo necesitamos.

El Observatorio de Financiación Familiar de la Agencia Negociadora de Productos Bancarios ha hecho públicas unas estadísticas en las que se resalta que el 31% de los embargos hipotecarios se podían haber evitado con una simple reunificación de deudas.

¡El 31%! 3 de cada 10 embargos, eso es una barbaridad, una auténtica vergüenza que ese porcentaje de gente haya tenido que perder su domicilio cuando la solución era tan sencilla, estaba tan clara y todo era cuestión de un poco de cultura financiera o de información.

Porque los bancos que embargaron esos pisos sabían perfectamente que con la reunificación todo se habría resuelto, pero no informaron correctamente a sus clientes, prefirieron embargar los pisos, y ahora se los tienen que comer con patatas.

Un error doble, por tanto, un error ético por no haber ayudado ni informado correctamente a sus clientes, y un error económico, porque habrían evitado quedarse sin la liquidez que ahora tanto buscan, habrían seguido cobrando las cuotas hipotecarias y no tendrían un inmovilizado inmobiliario tan elevado.

Pero aún hay más, esas mismas estadísticas publicadas hablan de que un 37% de las familias españolas tuvieron que retrasar un pago hipotecario durante el año 2009. Seguro que esas mismas familias podrían también reunificar deudas, con lo que sus cuotas resultantes serían menores y podrían hacer frente a ellas con mayor facilidad.

Nos encontramos, por tanto, con un entorno en el que los ciudadanos españoles tenemos poca cultura financiera, eso es un hecho, y en el que, además, sufrimos los abusos de las entidades financieras que en lugar de informarnos como deberían, se limitan a vendernos el productor financiero que les obligan desde su propia central.

Se rompe así el círculo de confianza que se debería de establecer entre el cliente y la entidad financiera, un círculo de confianza que sólo tiene un sentido, cuando debería ser una calle de doble circulación, es una situación en la que el ciudadano de a pie confía en el Director de su sucursal bancaria, pero éste en lugar de devolver esa confianza con información honesta, lo hace con información interesada.

En definitiva, el cuento de siempre, los bancos y las cajas que utilizan a los ciudadanos como simples números a los que se puede utilizar a su antojo. En ello estuvo el origen de la crisis, y como no ha cambiado absolutamente nada, en ello está el germen de la próxima crisis.